Aunque incrementó en casi 10 por ciento sus ingresos, Kimberly-Clark de México generó 1.5 por ciento menos flujo operativo en el cuarto trimestre de 2018 respecto al mismo lapso de un año antes, reflejo del encarecimiento de los precios de las materias primas y la energía.
En su reporte enviado este jueves a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la empresa que dirige Pablo González reveló que durante el periodo de octubre-diciembre de 2018, sus ventas netas ascendieron a 10 mil 334 millones de pesos, 9.6 por ciento más que en igual trimestre de 2017.
“Las ventas del cuarto trimestre aumentaron 10 por ciento por mayor volumen, precio y mezcla. Los precios crecieron 9 por ciento mientras el volumen total lo hizo en 1 por ciento”, detalló la dueña de marcas como Pétalo, Kleen-Bebé, Kleenex, Cottonelle y Kotex.
Pese al aumento en sus ingresos, su utilidad bruta apenas aumentó 1 por ciento, a 3 mil 442 millones de pesos. Este obedeció al impacto en costos provocado por el encarecimiento de las materias primas y la energía.
“Dichos precios fueron, en su mayoría, más altos secuencialmente y compararon muy desfavorablemente contra el año anterior. Tal fue el caso de las fibras vírgenes y recicladas, así como los derivados del petróleo que no han reflejado las bajas en los precios del mismo”, detalló el grupo.
Aunque la energía bajó ligeramente con relación al tercer trimestre, la comparación anual fue muy negativa, al igual que lo fue la del gas natural.
“En resumen, presión de costos en comparación con los tres meses previos y comparaciones muy negativas contra el año anterior. El tipo de cambio promedio también aumentó 3 por ciento de manera secuencial y 6 por ciento año contra año”, indicó la empresa en su informe a la BMV.
Los mayores costos fueron parcialmente compensados con el programa de ahorros implementado por la empresa y que en el cuarto trimestre alcanzaron los 400 millones de pesos. Además, los gastos de operación como porcentaje de las ventas disminuyeron en 90 puntos base, a 16.3 por ciento.
Sin embargo, el impacto de los mayores precios de las materias primas y los energéticos provocaron que la utilidad de operación de la firma cayera 1.9 por ciento y que el EBITDA disminuyera 1.5 por ciento.
Finalmente, la utilidad neta de Kimberly-Clark de México se redujo 5.5 por ciento, a mil 16 millones de pesos, como resultado del débil desempeño operativo.
Durante 2018, la compañía realizó inversiones de capital (Capex) por mil 792 millones de pesos y pagó dividendos por 4 mil 874 millones a los accionistas.
