Hasta no hace mucho tiempo, se hacia referencia a los códigos QR como una historia de potencial y fracaso. No obstante, durante el pasado verano empezaron a aparecer de nuevo, especialmente en las cartas de los restaurantes, como herramienta ante las medidas de seguridad e higiene impuestas a causa de la COVID-19. Asimismo, los códigos QR han ido adentrándose en los últimos meses en otras áreas como los pagos móviles.
Los consumidores han aceptado los códigos QR aprendiendo a utilizarlos y percibiéndolos como algo positivo, que aporta seguridad en el contexto actual. Un estudio británico de Outform concluye que los consumidores creen que los códigos QR mejoran la seguridad de sus compras. Un 57% de los consumidores de entre 18 y 34 años creen que hacen las tiendas más seguras y un 40% de los mayores de 55 considera que pueden aumentar la seguridad.
El nuevo contexto ha aumentado el potencial de los códigos QR que son percibidos por los consumidores como una herramienta positiva segura y un elemento de valor. Clic para tuitear
En este sentido, un 57% se siente cómodo en términos de seguridad escaneando los códigos QR que las tiendas posicionan. Esta herramienta ha dejado de ser algo misterioso para pasara a ser algo positivo, seguro y un elemento de valor.
Por ello, no solo las marcas y empresas les están prestando nuevamente mucha atención, sino que también se encuentran con una potencial nueva herramienta de valor para su futuro inmediato.
MÁS EXPERIMENTOS Y USOS
Como apuntan en Digiday, los códigos QR se han convertido en la puerta a cualquier cosa, a todo lo que los marketeros puedan imaginar e integrar. Las posibilidades son múltiples y los departamentos de marketing están empezando a incorporarlos en el packaging, los elementos de display en retail o incluso en anuncios exteriores. Son escenarios en los que ya se habían probado los códigos QR en sus inicios, pero no tuvieron gran aceptación.
No obstante, el contexto actual, favorece el uso de esta herramienta ya que los consumidores son más receptivos a la tecnología y continúan reticentes a tocar muchas cosas, por lo que se sienten más cómodos con los códigos QR y su potencial es más elevado.
Por otro lado, las compañías DTC han empezado a poner códigos QR en sus diseños de packaging como vías para dar más información y personalizar la experiencia de un modo más eficiente. En algunos casos, el código lleva instrucciones de montaje o vídeos.
