Emprendedores de chocolate producido en Izabal y en Suchitepéquez han sido reconocidos en Francia en el concurso internacional de “Chocolates de origen” 2022.
El proyecto guatemalteco y familiar que nació meses previo a la llegada de la pandemia de Covid-19 al país, ha sido reconocido con una medalla de plata por parte de la agencia francesa de promoción de productos agrícolas AVPA.
Se trata de tres hermanos que decidieron sostener un vínculo directo con los productores de cacao y cambiar la forma de comercializarlo.
Pablo, Julio y Luis Enrique Matute son quienes tuvieron la visión de hacer algo diferente con la preciada semilla del cacao.
Los hermanos Matute apostaron por el chocolate de especialidad realizando alianzas directas con cooperativas, fincas y colectivos productores de cacao, en rededor de Guatemala.Con el cacao como materia prima seleccionada en un proceso de exigente catación, han logrado producir un chocolate que cumple con los estándares de calidad mundial, producido totalmente en territorio guatemalteco.
Pablo Matute, quien es co-fundador de Chocolates Sero, el nombre con el que se bautizó al emprendimiento familiar y cuya planta productora se denomina Cacao Embassy, S. A. indica que ese había sido su sueño respecto al cacao.
El modelo de este emprendimiento permite pagar el doble a los productores por cada kilogramo de cacao, en comparación a lo que maneja en el mercado internacional.
«Vemos con mucho entusiasmo que los productores de cacao reciben un pago justo sobre sus cultivos, esto tiene un impacto positivo para sus familias y comunidades, y también sobre la biodiversidad local», expresa Matute, quien detalla que el cacao que utilizan es el más fino y crece bajo la sombra de bosques nativos. Esto crearía una nueva demanda que permitirá ampliar los bosques, indicó.
Emprendimiento en pandemia
Los hermanos Matute decidieron invertir en maquinaria y con ello formalizar su emprendimiento para poner diversos productos como el cacao como materia prima.
Sin embargo, la pandemia del Covid-19 representó un gran reto, pues en esas condiciones debían crear un mercado y la cultura del consumo del chocolate de calidad.
Una de las herramientas que les ha ayudado ha sido el uso de las plataformas digitales, con las que se han dado a conocer y han podido ofrecer sus productos, tanto para consumo final como para ser utilizados en repostería.
Dentro de su catálogo fueron dos tipos de barras de chocolate las que fueron galardonadas en París, uno producido en Suchitepéquez y el otro en Izabal. No obstante, también trabajaron con cacao producido en alta Verapaz y Petén.
Medalla de plata
AVPA propone una clasificación que permite la expresión de todos los gustos tradicionales encontrados entre los chocolateros en los países productores de cacao.
Para ello, se definen dos categorías principales: chocolate negro sin ningún adyuvante y otros chocolates (chocolate negro con adyuvante, con leche, con diversos ingredientes y caramelos de chocolate).
En ese sentido, Guatemala recibió dos medallas de plata: una por la presentación del chocolate con 70% de origen único (Suchitepéquez, finca La Cruz) en su presentación sin adyuvantes y el otro es un chocolate 70% de origen único (Izabal, Finca Kampura) en su presentación de chocolates sin lecitina.
El emprendimiento de los hermanos Matute fue el único de Guatemala en recibir las medallas de AVPA. Y es que estos guatemaltecos ha sido cuidadosos en el control del proceso del tostado de las semillas del cacao, el cual es distinto de pendiendo de la región donde se cultiva.
AVPA reconoce la calidad no solo del cacao de origen, también de cafés, tés y aceites vegetales, y desde hace 20 años sus calificaciones han sido referencia en el mundo.
El emprendimiento, además del premio francés, ha sido seleccionado en el sexto lugar del Eko Bootcamp, donde 700 negocios se inscribieron y 20 fueron elegidas. El premio en este caso consistió en una gira por varias ferias alimentarias realizadas en Madrid (Francia), París (Francia) y Düsseldorf (Alemania).
