Coca-Cola FEMSA reemplazó las pajillas plásticas de los envases de sus bebidas para dar paso a las nuevas pajillas de papel 100% biodegradables, reciclables y renovables, como parte de su estrategia de sostenibilidad.
Maricel Álvarez, gerente de Asuntos Corporativos de Coca-Cola FEMSA, explicó que el cambio responde a la estrategia de sostenibilidad y está alineado a las iniciativas de economía circular de la empresa.
“Nuestro equipo ha trabajado en la implementación de la nueva pajilla para encontrar la mejor opción, luego de un riguroso proceso de selección con el fin de garantizar la calidad y la inocuidad, apegados a los más altos estándares de producción que caracterizan a los productos de Coca-Cola FEMSA”, afirmó Maricel Álvarez.
La pajilla actual está hecha de tres capas de papel reciclable y con materiales 100% aptos para uso alimentario. Además de ser segura para el consumo y respetuosa con el medio ambiente, la estructura de la pajilla de papel es resistente y permanece intacta el tiempo suficiente para que el líquido del envase se consuma en su totalidad.
Envases sostenibles y 100% reciclables
Coca-Cola FEMSA innova constantemente en sus empaques, reduciendo la cantidad de material que se utiliza para producir las botellas. Todos los envases de su portafolio son 100% reciclables, incluyendo la tapa, la botella y la etiqueta y contienen un 25% de resina reciclada.
Desde el año 2019 implementó la tapa corta en todas las botellas del portafolio, para utilizar menor cantidad de material. Esta iniciativa representa a la fecha un ahorro de más de mil toneladas de plástico.
En Nicaragua, Coca-Cola FEMSA apoyó a la organización Recicla Nica en la campaña medioambiental Plan Verano Verde 2022, mediante el cual se recolectaron 340 kilos de residuos, de los cuales 210 son reciclables. La recolección se realizó en las playas de La Boquita, Pochomil, Huehuete, Masachapa y Xiloá.
Además, como el embotellador más grande de bebidas de la marca Coca-Cola a nivel mundial, adoptó su meta global de ayudar a recolectar y reciclar el equivalente al 100% de los empaques que produce para 2030 a través de la iniciativa “Un Mundo Sin Residuos”.
