- La empresa Scharfstein ha desarrollado diversas herramientas que buscan hacer del estacionamiento una unidad de negocios en proyectos inmobiliarios y del retail.
- “Pasaron de ser un espacio para dejar el auto a un punto muy importante del servicio al cliente”, afirma Gastón Pinto, especialista de la compañía chilena.
La evolución del mercado de los estacionamientos apunta principalmente en dos direcciones: primero, a incorporar tecnología para mejorar la experiencia del usuario; y segundo, a su integración con distintos sistemas para consolidar un servicio de alto valor.
Gastón Pinto, responsable del área comercial de Parking de Scharfstein, empresa especialista en tecnologías para la seguridad, explica que en ese contexto la búsqueda de nuevos nichos de negocios asociados al servicio de parking es algo cada vez más frecuente en el retail y los strip centers.
Un proceso impulsado por la masificación de nuevos medios de pago a través de los teléfonos inteligentes y el incremento en el uso del automóvil. En Chile, más del 70% de los hogares tiene al menos un vehículo (la cifra, registrada por Cadem en 2022 se compara con el 53% de 2014) y el uso de este medio de transporte se disparó en los últimos tres años.
“Hay un cambio conceptual muy importante. Antes, las grandes tiendas o las constructoras dejaban los espacios sobrantes para estacionamientos, mientras que hoy se considera incluso el primer punto de contacto para una marca”, comenta Pinto.
Los tiempos donde el cliente perdía la tarjeta física o se quedaba sin efectivo para pagar parecen estar llegando a su fin gracias a aplicaciones como Appark, desarrollada por Scharfstein en su unidad de I+D+i Scharfstein Labs. La solución está integrada en los sistemas de alrededor de diez edificios en la Región Metropolitana, y permite que el usuario se registre con su placa patente y sus datos bancarios, para hacer el cobro de forma automática a través de su teléfono inteligente.
Tecnologías como Appark forman parte de las innovaciones que buscan quitar la “fricción” de la experiencia del usuario.
Añadiendo que: “El uso de esta aplicación, y también de otras con características similares, permite saltar las etapas clásicas del ingreso a un estacionamiento: sacar el ticket, levantar la barrera, pagar el ticket y volver a colocarlo en la salida. Hoy manejamos mucha información en nuestros smartphones, permitiéndonos gestionar el pago o ingreso a distintos lugares, cargar combustible o acceder al transporte. La industria del parking no se puede quedar atrás”.
Integrada al retail
Uno de los comercios en los que se utiliza es en los centros del Mall Plaza. Integrado a la aplicación de Falabella, los usuarios pueden escanear el ticket de estacionamiento con lectura del código QR y eventualmente inscribir su vehículo para hacer el pago por medio de la tarjeta de crédito propia. Esto hace más fluido su ingreso y salida, pues la barrera se levanta de forma automática.
Según la compañía de seguridad, aproximadamente el 50% de todos los usos de los estacionamientos en los diez lugares equipados con el sistema completo se realiza mediante la aplicación de pago. Asimismo, la otra mitad todavía muestra preferencia por los métodos de pago convencionales, al menos hasta el momento.
También hay otra opción: que el cliente retire el ticket y lo pague escaneando el QR a través de la misma app. Esto evita las colas en los tótems para pago y eventualmente demoras asociadas. Cuando el automóvil se retira del edificio, la barrera se levanta de forma automática, lo cual igualmente agiliza la experiencia.
El concepto de la no fricción busca evitar todo ese trámite físico, disminuyendo el contacto con el sistema y las interacciones que lo hagan perder tiempo. Ese tipo de facilidades el usuario las reconoce como un beneficio que lo invita a regresar.
En este proceso de evolución, migrar desde la banda magnética al código QR ha sido esencial, pues ayuda a tener más información y que no solo sea captado por un lector específico y particular (el del propio edificio), sino que también contribuye a integrar datos de mayor complejidad, como los bancarios. “El uso masivo del código QR en parking es una tendencia mundial que es clave para este desarrollo y por ello cada día más empresas en Chile se están sumando”, concluye Gastón Pinto.
