Según publica el portal La Vanguardia
Las ventas durante los cuatro meses de festivos abiertos ascienden a 503 millones
Abrir los domingos está resultando rentable a los comerciantes de las zonas turísticas. El balance encargado por Barcelona Oberta concluye que las ventas entre el 15 de mayo y el 15 de septiembre del año pasado en la Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT) alcanzaron los 503 millones de euros. Los turistas gastaron 306 millones y los residentes, 107. “Nos queda mucho camino por recorrer, nuestro objetivo es abrir todo el año”, insistió ayer el presidente de Barcelona Oberta, Gabriel Jené. La entidad espera negociar cuanto antes con el Ayuntamiento la ampliación del calendario en la ZGAT para, de forma urgente, avanzar la apertura en festivos durante Semana Santa y la Copa del América.
El estudio sobre los efectos de la ZGAT en el comercio, la demanda y la ocupación –realizado por RBD Consulting Group a partir de 2.610 encuestas– arroja varias conclusiones. La primera, que el 75% de los turistas afirma que su compra fue impulsiva. Entraron en las tiendas porque estaban abiertas y así gastaron un total de 228 millones de euros. La venta desplazada, la de los turistas que habrían vuelto otro día, supone 78 millones. De hecho, aunque el motivo principal de su visita en la zona era hacer turismo (el 61%), frente a las compras (18%) o pasear (13%), tres de cada cuatro visitantes de la ZGAT acabaron comprando. “Estas son ventas que se habrían perdido con las tiendas cerradas; tenemos que dejar de perder oportunidades cuanto antes mejor; no nos podemos permitir quedarnos fuera de la liga de las ciudades que abren en domingo; todas las capitales europeas abren”, mantiene Jené.
El informe muestra un perfil de comprador mixto: un 51,7% son turistas y un 48,3% son residentes. De estos, un 75,2% son vecinos de Barcelona y un 24,8% de otros municipios de la Región Metropolitana. Pese a representar un volumen similar en número de clientes, el incremento de la facturación está mucho más vinculado a los visitantes. Mientras el gasto medio de los turistas se sitúa en los 112 euros diarios (127 entre los extranjeros y 68 entre los turistas nacionales); el gasto medio de los residentes fue de 57 euros. En este grupo, también se detectan diferencias: los barceloneses hacen un gasto medio de 49 euros en día festivo y sus compras están más enfocadas a satisfacer necesidades cotidianas como alimentación o productos frescos. En cambio, el perfil de compra de los clientes procedentes de la Región Metropolitana es más similar al de los turistas, que adquieren principalmente ropa y accesorios para la persona y, en segundo lugar, ocio y cultura.
La compra del 75% de los turistas es impulsiva y no la habrían hecho de no estar abiertas las tiendas, mientras que el 68% de los residentes afirma que habrían comprado lo mismo, en la misma zona, pero otro día. “Solo el 0,1% del gasto de los residentes se desplaza de su lugar de origen y, por otra parte, la ZGAT atrae al comercio físico unos 10 millones de euros que de otra forma habrían sido compras online”, añadió ayer Josep Maria Marcos, coordinador del estudio.
La facturación de las tiendas aumenta un 9,5%, según un informe encargado por Barcelona Oberta
La ZGAT, que engloba Ciutat Vella, Raval, Born, Pelai, Sant Antoni, avenida Gaudí y la zona de Paseo de Gràcia y Diagonal, se puso en marcha en 2022, tras un pacto municipal al que se sumaron, además de los comerciantes, los sindicatos. De este modo los establecimientos de más de 300 m2(los de menos de esta superficie ya podían) tuvieron la opción de abrir en lugar de cinco domingos al año, veinte, desde las 12 hasta las 20 horas.
“Al principio hubo un desajuste en las contrataciones porque todo se puso en marcha muy rápido, pero se ha visto que cuanto más podamos abrir, más ocupación y más estabilidad habrá”, advirtió Jené. El estudio afirma que la ZGAT generó el año pasado entre 1.600 y 1.800 puestos de trabajo adicionales en el sector comercial.
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