Los aragoneses son los españoles que más valoran la posibilidad de comparar y elegir entre múltiples productos y precios en el canal online, aunque también creen que en el e-commerce deberían mejorarse aspectos como la política de devoluciones, la seguridad de la web o la atención al cliente.
El ecommerce es una realidad entre los consumidores aragoneses, valorándose especialmente de la compra online la comodidad de recibir los productos en casa o en el punto de venta, así como la posibilidad de adquirirlos en cualquier momento sin restricciones de horarios.
Son las principales ventajas que apuntan de forma generalizada el 23% de los aragoneses, que además son los de los españoles que más valoran la posibilidad de comparar y elegir entre un amplio abanico de productos y precios. Al menos es la opinión del 22%, porcentaje que se sitúa por encima de la media española del 18%, según los datos del II Estudio de Marketing Relacional, que ha sido realizado por Mediapost en colaboración con la Asociación de Marketing de España.
Frente a estos aspectos más positivos de las ventas online, los aragoneses todavía ven varios puntos de mejora en el ecommerce. Uno de los principales es la política de devolución de las tiendas online, factor que es apuntado por el 41%.
Los consumidores de esta comunidad autónoma también creen -en un 32%-, que deberían mejorarse las condiciones de seguridad en las webs, mientras que un 29% opina que es insuficiente la atención al cliente que se proporciona y que, por ejemplo, podría mejorarse con chats o chatbots, siendo esta una opción que prefiere el 51% en comparación con otros canales de comunicación como el teléfono, que es apuntado por el 33%. En cuanto a los gastos de envío, no se observan problemas. Tan solo el 1% señala que son caros.
Las ventajas que los aragoneses observan en las ventas online no disminuye el interés por la tienda física. En concreto, en cuanto a este canal de venta, el 60% de los aragoneses valora principalmente que se pueda ver el producto antes de comprarlo. A esta valoración positiva se suman otros aspectos como encontrar el producto fácilmente -lo señala el 51%-, así como la atención personalizada que indica el 49%.
A la hora de comprar, el consumidor aragonés puede definirse como infiel -junto con los valencianos son los consumidores más insatisfechos-, porque puede cambiar su decisión de compra en el 56% de los casos si encuentra un precio mejor o bien ofertas más a atractivas en el 50% de los encuestados de Aragón. Además, el 39% se muestra dispuesto a cambiar de marca por estar insatisfecho con la que consume.
El estudio también presta atención al canal que los aragoneses prefieren para recibir información de las marcas. Y aquí gana el buzón físico para recibir los folletos publicitarios, que es la vía elegida por el 56%, porcentaje que se encuentra cuatro puntos por encima de la media nacional.
No obstante, aquí se observa una brecha de edad. Los jóvenes de entre 18 y 34 años de edad tienen una clara preferencia por los medios digitales. En concreto, el 41% prefiere recibir información por redes sociales, porcentaje que contrasta con el 22% a nivel nacional. El e-mail es otra de las vías preferidas para el 38% de los aragoneses, dato que se sitúa cinco puntos porcentuales por encima de la media española del 33%.
Y, ¿qué piensan de la RSC? El 86% de los aragoneses (dos puntos por debajo de la media nacional) cree que tanto las marcas como las tiendas, ya sean físicas o ecommerce, deben involucrarse en cuestiones sociales y medioambientales, aunque un 42% apunta esta posibilidad solo si no repercute en el precio. Las mujeres y los consumidores más jóvenes son los más concienciados.
