Si alguna vez le ha comprado un juguete a su perro pensando que sería un regalo estupendo y su peludo compañero ni siquiera lo ha olisqueado, no se preocupe, la inteligencia artificial tiene la solución.
La cadena de tiendas de animales brasileña, Petz, ha creado una herramienta denominada Pet-Commerce que combina la inteligencia artificial y el reconocimiento facial para ayudar a los perros a elegir sus propios juguetes.
El funcionamiento del sistema consiste en colocar un dispositivo conectado a internet con cámara incorporada frente a la cara del perro para identificar la reacción favorable o desfavorable de la mascota hacia el catálogo de productos.
Así, el usuario puede ir clicando en cada uno de los juguetes disponibles, tras lo cual se reproduce un vídeo en amarillo y azul, colores que al parecer ven mejor los perros. Aquellos productos que capten la atención del animal adquieren un color verde, mientras que los que no susciten su interés, lo harán en rojo.
A continuación, el producto se incluirá en el carrito de compra, aunque el usuario deberá confirmar la operación.
La iniciativa ha sido elaborada junto a Ogilvy que califica el proyecto como rompedor y busca aumentar la base de clientes de la compañía y aumentar las ventas.
Para visualizar el vídeo haga clic aquí.
