Correos ha anunciado una operación que le permitirá, a través de una joint venture con las empresas Kerry Logistics Network Limited, cotizada en la Bolsa de Hong Kong, y Global Freight Systems, un grupo privado chino, operar en el sudeste asiático. Correos llevará a cabo una inversión de 5,7 millones de euros en la nueva sociedad, que ya se ha constituido. Se trata de la segunda operación orientada a la expansión internacional de la operadora española, tras la adquisición del 51% de la portuguesa Rangel el pasado mes de abril.
La nueva compañía promoverá una planta de admisión y clasificación de paquetería en China, que se situaría en el sur del país, a menos de 100 kilómetros de Hong Kong. Se trata del área de comercio digital transfonteriza más activa del mundo, cercana a numerosos aeropuertos nacionales e internacionales con gran volumen de tráfico. Uno de ellos es el de Hong Kong, la terminal de carga con más tráfico y capacidad del mundo, con cinco millones de toneladas métricas gestionadas en 2018, que supone la salida para el 80% de los envíos generados en el sur del país. Además, se ha proyectado una ampliación para gestionar casi nueve millones de toneladas al año.
A pleno rendimiento, el procesamiento de la nueva planta equivale a 25.000 paquetes/hora, lo que supone unos 500.000 paquetes al día, si las máquinas están operativas 20 horas/día.
VISTO BUENO SINDICAL
El sindicato CCOO, mayoritario en la compañía, ha aplaudido el proyecto al considerar que “la caída de la carta tradicional y las oportunidades que se abren con el e-commerce indican el camino a seguir para mejorar la eficiencia, situarse en los parámetros de competitividad del resto de sus homólogos europeos y conseguir ingresos mediante un plan de diversificación que debe pivotar en la logística y la expansión internacional”.
En este sentido, el sindicato urge a aprobar un plan estratégico que vertebre y dé coherencia a la expansión iniciada con estas dos operaciones. Un plan estratégico que defina el papel a jugar por Correos, que tenga como motor a la matriz, una empresa con 51.000 trabajadores.
Comisiones considera que el nuevo Gobierno “debe respaldar ambas líneas estratégicas, incluidas en su programa electoral, y no dejarse influir por las presiones que el lobby privado y sus confluencias (Comisión Europea, CNMC, AIReF…), que están haciendo una campaña inadmisible para dejar a Correos fuera de juego”.
