Nacieron como una startup de desarrollo de software para el mercado norteamericano, pero ahora trabajan pensando en la próxima evolución de Internet. Por dónde pasa el futuro de las compras online.
En 2008, José María Beltramini y Aldo Bressan decidieron crear Summa Solutions, una agencia de digital commerce que, desde su origen, se propuso “adelantarse a los tiempos”. Nacida como una startup de desarrollo de software orientada al mercado norteamericano, el surgimiento de la compañía fue el resultado de las experiencias que sumaron ambos fundadores tras su paso por importantes multinacionales de Argentina, Colombia y Estados Unidos.
“Si bien 2008 fue un año particularmente complejo, marcado por una fenomenal crisis financiera en Estados Unidos tras el colapso de la burbuja inmobiliaria, creímos que existía una gran posibilidad de crecimiento de los servicios nearshore (desarrollo de software para Estados Unidos desde Latinoamérica) y que, si lográbamos posicionarnos, una vez superada la recesión, saldríamos fortalecidos”, recuerda ahora Beltramini.
Sin embargo, lo que sería Summa Solutions empezó a diseñarse en bares de café y se convirtió en tema recurrente de un almuerzo tras otro en la compañía estadounidense TeleTech Holdings, donde se conocieron sus fundadores.
Tiempo después, José María y Aldo decidieron dar el salto y la empresa inició sus operaciones con una inversión de US$ 50.000, suficientes para montar una pequeña oficina en el barrio de Martínez en Buenos Aires, donde empezó a trabajar un equipo de 5 personas.
Desde entonces el crecimiento fue constante: hoy cuentan con una plantilla de más de 170 personas, clientes en 18 países y una facturación de US$ 7 millones en 2021.
Del eCommerce al “digital commerce”
Según la mirada de estos dos emprendedores, en Estados Unidos el eCommerce lleva siempre no menos de dos años de ventaja respecto de lo que ocurre en la Argentina.
“Observábamos cómo ya en aquella época era objeto de otro enfoque que asumía en forma más consistente una perspectiva de masificación, mientras que acá en ese momento aún estaba sesgado a ser meramente la web de la empresa, donde todo lo disruptivo se consumía en el propio acto de tenerla, para interés de un nicho pequeño de iniciados”, cuenta Beltramini.
En la Argentina, agrega, “comprar por Internet era una cuestión de audaces, como todavía hoy pueden ser vistos los que adquieren criptomonedas”.
Por eso, su agencia trabaja con la perspectiva de lo que será la próxima evolución de Internet y se proponen proveer todas las soluciones y servicios que hagan posibles nuevas experiencias para las marcas y sus clientes.
“La expresión eCommerce remite a una distinción entre compras online y físicas que, según visualizamos, tenderá a diluirse o directamente desaparecer”, afirma Beltramini.
En esa línea, profundiza: “Nuestra visión de futuro se apoya en lo que es una característica de los centennials, la primera generación de nativos digitales y que ven el acto de comprar por Internet como algo natural y transparente, casi no conciben que algo no pueda comprarse por esa vía”.
En su concepción, “comprar será simplemente comprar, y deberá poder hacerse por Internet en un acto completo e integrado con el canal físico convertido en ámbito sólo de experiencias que justifiquen la concurrencia, ya no como sede para concretar una transacción”, completa el emprendedor.
Un modelo basado en know how tecnológico
Entre los clientes de Summa Solutions se encuentran empresas como Unilever, Farmacity, RICOH, Cetrogar, Midea, Jazmín Chebar, Intercorp, Unicomer, TodoModa e Isadora, entre otros.
Para cada uno de ellos, la agencia elabora una propuesta de valor centrada en la implementación de soluciones tecnológicas basadas en Adobe Commerce, VTEX y OroCommerce, un trío de plataformas que se encuentran entre las diez más importantes del mundo.
“Nuestra tarea comienza con entender todas las necesidades funcionales que tiene el cliente, en un desarrollo absolutamente personalizado, partiendo de la base de que, por ejemplo, no es lo mismo vender servicios que bienes físicos, como tampoco es hacerlo para una farmacia o un supermercado”, explica Beltramini.
Desde ahí, adecúan las plataformas en base al negocio particular del cliente, también en cuanto a la interfase gráfica, adaptándola a la imagen de la marca, a su estética y a las particulares demandas en cuanto a funcionalidad y operatoria que el sitio requiera”.
“Tomamos desde el frontend al backend, pero fundamentalmente estamos en la cocina, en la parte de atrás del eCommerce, integrando toda la serie de procesos que se suceden cuando el cliente termina su check out e ingresa el pedido”, cuenta el especialista.
Ese pedido tiene que integrarse con el poder logístico del negocio que, a su vez, tendrá que facturar y despachar. “Nuestro trabajo consiste, además, en hacer que todo eso sea simple, lo que comprende poner en funcionamiento muchísimas cosas en la integración de tareas y componentes”, cuenta el fundador de la agencia.
Hacía dónde va el comercio digital
Tanto Beltramini como Bressan observan con atención la actualidad del “digital commerce” que, además de la aceleración que se vivió en la pandemia, encuentra a Latinoamérica como la región de mayor crecimiento y a la Argentina como líder de ese movimiento.
Por eso la firma ya tiene el foco en tendencias como el live commerce, a partir de la posibilidad de que las ventas se concreten en el marco de interacciones por streaming, en tiempo real; así como de las potencialidades del social commerce, a partir de que, por cualquier red social se pueda transformar una interacción en una transacción.
Además, contemplan también el “metaverso”, la próxima evolución de Internet con su mundo virtual inmersivo y la posibilidad de que los NFTs se conviertan en activos clave de un ecosistema que la agencia ya incluyó en su agenda.
“Como especialistas en soluciones de digital commerce, el compromiso pasa por lograr que algo que cada vez se torna más complejo -como el comercio digital en un entorno omnicanal-, sea transparente para los clientes, para que puedan enfocarse en su negocio, mientras cuentan con el apoyo de un partner tecnológico innovador y con ejecución de alta calidad”, asegura Bressan.
Por lo tanto, la compañía redoblará su apuesta para 2022 a fin de consolidarse como empresa regional, para que proyecta llevar su equipo a más de 250 colaboradores en 6 países de Latinoamérica y crecer un 30% en facturación.
“Vemos que la tasa de crecimiento del eCommerce en Latinoamérica se mantendrá entre las más altas del mundo y muy por sobre las del retail físico”, pronostica Beltramini.
