JOHNSON’S® baby mantiene compromiso con la seguridad y fórmulas naturales, desde hace 125 años, la misión ha sido crear productos cada vez más puros para los consumidores más exigentes: los bebés del mundo.
Se ha enfocado en trabajar fuertemente para crear productos tan suaves y seguros que se puedan utilizar desde el primer día de vida; ese es su patrón de pureza.
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Actualmente, lidera el mercado 1 al formular productos para bebés con ingredientes con
propósito (el mínimo de ingredientes necesarios) y más del 90% de ellos de origen natural, logrando fórmulas más puras y suaves, por supuesto, superando los estándares regulatorios reconocidos internacionalmente:
● Reducción en un 50% del número de ingredientes, siendo el 90% de ellos de origen natural como el aceite de girasol, coco, semilla de algodón entre otros.
● Sin colorantes; el color que diferencia cada línea de productos está en el empaque.
● Libres de parabenos, sulfatos y ftalatos, manteniendo formulas eficaces, seguras y
suaves para la piel de los bebés.
● El porcentaje de ingredientes que no es de origen natural es usado por sus beneficios específicos como conservantes, reguladores del pH, agentes acondicionadores, fragancias, vitaminas y antioxidantes. Claramente, estos ingredientes también son seguros, verificados y probados con los más altos estándares globales.
Es importante señalar que, todos los ingredientes de las fórmulas JOHNSON’S ® tienen un
papel fundamental en la formulación de sus productos que permiten que estos sean suaves
para la piel, el pelo y los delicados ojos de los bebés.
“Estamos comprometidos con un estándar de pureza elevado para crear productos para bebés. Es por eso que hemos desarrollado un proceso exhaustivo para garantizar la seguridad y la calidad de los mismos. Si una fórmula falla en algún momento del proceso, volvemos a la planificación”. Jeritza Mosquera, Científica JOHNSON’S ® .
El proceso de garantía de seguridad cuenta con cinco niveles:
Materias primas: Los productos seguros comienzan con materias primas seguras. Por este motivo, se analizan minuciosamente cada material y proveedor, y sólo se aceptan materias primas de distribuidores que cumplan estrictos estándares de calidad y seguridad.
Evaluando ingredientes: Los ingredientes deben ser evaluados y responder las exigencias de uso seguro en productos de cuidado personal. Van más allá para evaluar tendencias e ingredientes que agreguen performance, manteniendo los estándares de seguridad.
Evaluación y pruebas clínicas: Una vez que se crean las fórmulas de los productos, se
prueban con voluntarios en el laboratorio. Los expertos prueban cada posibilidad de
problemas, incluyendo irritación en la piel y los ojos. Como resultado, la base de datos de
seguridad incluye información de una amplia variedad de reacciones a fórmulas que les
permiten el mejoramiento de estas.
Uso en la vida real: Se prueba la forma en que los consumidores reales utilizan los
productos, esto inicia a través del diálogo con el consumidor. También se prueban los
productos en el laboratorio, bajo las más diversas situaciones: calor y frío extremos,
humedad y otros. Todo ello, para comprobar la seguridad y consistencia de los productos.
Evaluación continua: Aún cuando el producto final llega a las tiendas, el trabajo no
termina. Además de prestar atención a nuevas informaciones, ya sea a través de enlaces
de atención al consumidor o por comentarios en redes sociales, se realizan actualizaciones
cuando se considera necesario, para que cada producto que colocan en el mercado
continue atendiendo las necesidades del consumidor y los estándares de seguridad de la
compañía.
“Es importante mencionar que todos nuestros ingredientes y fórmulas son evaluados por un grupo de toxicólogos y la oficina de seguridad médica con muy altos estándares globales
para cumplir con todas las regulaciones de seguridad en uso, en diferentes tipos de
consumidores: recién nacidos, bebés, niños y adultos”, explicó Jeritza Mosquera, Científica
JOHNSON’S ® .
La marca siempre se ha caracterizado por superar los estándares de calidad en sus
productos, por este motivo, la pureza de sus fórmulas y su riguroso proceso de control de
seguridad y calidad les ha permitido responder a las necesidades especiales de los bebés y
niños, buscando siempre incluir ingredientes de origen natural en sus fórmulas. Además,
cuenta con el aval de organizaciones médicas, estudios científicos y principalmente de los
consumidores.
Finalmente, desde el punto de vista ambiental, tienen el compromiso de desarrollar
cuidadosamente cada una de sus fórmulas para que sean delicadas con el medio ambiente,
donde estiman que los procesos más eficaces ayudan a reducir el consumo de agua hasta
en un 20%.
Además, se priorizan los ingredientes que no son dañinos para la vida y los
ecosistemas acuáticos usando un sistema patentado que los ayuda a formular productos no
tóxicos, biodegradables y que no son bioacumulables en el medio ambiente.
