- Viña Polkura, estuvo contando sobre el modelo de negocios que han desarrollado para producir vinos de manera sostenible. Conversación Sven Bruchfeld, enólogo de Viña Polkura
Ya estamos en los últimos días del 2023, época de verano y festividades de fin de año, donde la comida y los bebestibles, como el vino, viven su boom en ventas.
Si te has preguntado alguna vez cuánto contamina la industria del vino, diversos estudios afirman que para producir una botella de 750 ml de esta preparación se liberan a la atmósfera 2,17 kg de CO2. Lo que equivale a conducir un auto pequeño a bencina por unos 20 a 30 kilómetros.
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Esto, teniendo en cuenta el método de cultivo, las condiciones de la zona de producción y las prácticas en bodega, es decir, cuánta refrigeración necesitan; además, del packaging y la distribución del producto final.
Sin embargo, el desarrollo sostenible de esta industria ha tomado fuerza y para hablar de un caso de éxito, en Clima de Cambio conversamos con Sven Bruchfeld, enólogo de Viña Polkura.
Viña Polkura: un ejemplo de sostenibilidad en la industria vitivinícola
En la industria gastronómica, el vino es un producto de primera necesidad. Viña Polkura lleva 20 años desarrollando un modelo de negocios amigable con el medio ambiente, en el que destaca la calidad de sus productos.
Sven Bruchfeld comentó que “el vino es algo que acompaña nuestra vida, nuestra cultura y todo. Entonces, creo que tenemos una responsabilidad de hacernos cargo de las externalidades que tiene la producción de vino“.
Sin embargo, reconoció que no partió como un proyecto verde y fue convirtiéndose en el camino. “Las emisiones de carbono de una viña pequeña son mucho más altas que las de una viña grande, es obvio en economía a escala. Siento que eso nos hace aún más responsables de buscar soluciones sostenibles”, comentó Sven Bruchfeld.
Y agregó que para compensar al medioambiente realizan una serie de acciones, como una planta de energía solar que cubre más del 100% del campo, para utilizar la menor cantidad de diésel posible.
Asimismo, contó que “descubrimos una flor dentro del campo que está en peligro de extinción, la Alstroemeria diluta, hemos trabajado por su recuperación”.
