Según el portal América Retail & Malls
Radiografía del Auge de las Tarjetas de Prepago en Chile, el escenario financiero chileno está experimentando una profunda transformación en los últimos años, evidenciando un cambio hacia la diversificación y digitalización de los medios de pago. Esta revolución se manifiesta claramente en la rápida adopción de las tarjetas de prepago no bancarias. Según datos recientes de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), hasta noviembre de 2023, el número de cuentas activas alcanzó los 8.816.415, marcando un impresionante incremento del 86% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
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En este panorama, Mercado Pago emerge como el líder indiscutible, dominando el 44% del mercado con 3,89 millones de tarjetas activas. Le sigue Fpay de Falabella, con un 28% de participación y 2,4 millones de tarjetas. No obstante, Falabella anunció el cierre gradual de sus operaciones en agosto. Por su parte, Tenpo, del grupo Credicorp, se sitúa en la tercera posición con 1,49 millones de tarjetas, abarcando el 17% del mercado.
Felipe Naranjo, director de Individuals Mercado Pago Chile, atribuye el éxito de Mercado Pago a su capacidad para abordar necesidades no satisfechas por la banca tradicional. Destaca su producto gratuito, de fácil acceso y múltiples funciones, incluida la generación de rentabilidad diaria por el saldo en cuenta, elementos que han contribuido a la inclusión financiera de millones de personas.
Si bien el número de tarjetas emitidas ha experimentado un crecimiento exponencial, también se ha observado un aumento significativo en el volumen de transacciones asociadas. Durante el último año, las transacciones mensuales aumentaron un 131,9%, alcanzando en noviembre de 2023 un volumen de $208.603 millones, un 86% más que el año anterior. Sin embargo, el porcentaje de utilización de estas tarjetas aún es relativamente bajo. De las 8,8 millones de tarjetas, solo el 13.7% registró operaciones en noviembre.
La disparidad entre el número de tarjetas y la frecuencia de transacciones se explica, en parte, por la diversidad de modelos de negocio en el ecosistema prepago. Fernando Araya, CEO de Tenpo, destaca que cada actor responde a propósitos y modelos de negocio distintos, lo que influye en el uso de estas tarjetas como medio de pago.
Sin embargo, la baja tasa de utilización también plantea desafíos importantes para la industria. La falta de aceptación de las tarjetas de prepago por parte de grandes comercios emerge como un obstáculo significativo. Araya destaca que esta resistencia evidencia un problema sistémico de interoperabilidad. La negativa de ciertos comercios, como Walmart y Falabella.com, a aceptar tarjetas de prepago afecta la cadena de pagos y la competencia en el mercado, sin razones objetivas que lo justifiquen.
Mientras tanto, los bancos están realizando una retirada gradual de la emisión de tarjetas de prepago. Santander cerró su producto Superdigital, Bci está migrando MACH hacia una cuenta corriente, y Banco Ripley anunció la integración de Chek dentro de su entidad.
En resumen, el panorama financiero chileno está siendo moldeado por la creciente popularidad de las tarjetas de prepago no bancarias. A pesar de los avances, persisten desafíos en cuanto a la aceptación y la interoperabilidad, aspectos fundamentales para una penetración más profunda de este medio de pago en la vida diaria de los chilenos.
