En Chile, el IPSA se mantiene firme en torno a los 5.000 puntos, subiendo 17,78% en pesos en lo que va de 2022.
Una inflación acumulada de 9,1% en doce meses es la que registró EEUU este miércoles, elevando los temores de los inversionistas respecto de una recesión en la principal economía del mundo. Y es que el proceso de alza de tasas por parte de la Fed para controlar la subida del costo de la vida mantiene a los mercados expectantes, y ha lastrado a las bolsas mundiales, así como el precio de los commodities.
IPSA se mantiene firme
El retorno se produce pesar de que el precio del cobre, que cerró en US$3,2963, anota una baja de 25% en el ejercicio, algo que históricamente habría hecho caer al selectivo accionario; a lo que se suma la escalada del tipo de cambio, que ya bordea los históricos $1.020, siendo el peso chileno una de las monedas más depreciadas del mundo, lo que seguirá presionando la inflación.
De hecho, al comparar el IPSA con otros mercados también muestran un rendimiento favorable. En dólares, en 2022 sube 0,78%, la novena de mejor desempeño del mundo, quedando muy lejos de otras plazas, donde e incluso de índices globales como el S&P500 que se desploma más de 20%, o el Dax de Alemania que pierde 28,49%. E incluso por sobre el desempeño de la región, donde el Bovespa de Brasil cae 2,5%.
¿Por qué el IPSA se ha mantenido en torno a los 5.000 puntos entonces? Javier Pizarro gerente Research Banchile Inversiones, señala que la bolsa “se ha mantenido relativamente firme respecto de otras regiones debido a que su nivel de valoración ya se encontraba en un mínimo histórico de 8 veces precio utilidad. Junto con lo anterior el continuo aumento de las expectativas de resultados de las empresas han permitido que el índice haya incluso aumentado durante este año”.
Sin embargo, también hay otros factores. Manuel Bengolea, socio de Octogone, sostiene que en pesos sigue están estable “pero viene haciéndose pedazos hace mucho tiempo, la verdad es que la barrera de los 5.000 puntos, creo que tiene algo más que ver con el rechazo que ha crecido”.
Además, apunta Bengolea, desde el día antes del estallido social y hasta hace algunos meses el IPSA era la peor plaza del mundo, por lo que “ya venía muy descontada. La baja del precio del cobre afecta las expectativas porque caen los ingresos al gobierno y la minería se desacelera, afectando a toda la economía, antiguamente el IPSA dependía del precio del cobre, pero esa correlación se perdió tras el estallido social. El cobre pasó de US2,6 a US4,8 y el IPSA se movió poco”.
Podría ser un buen año
En la actualidad, si se toma como referencia el día previo al estallido social de octubre de 2019, la bolsa chilena – medida en dólares- es la séptima de peor desempeño en el mundo, con una baja de 31,7%. En la región sólo es superada por la caída de 36,4% del Colcap de Colombia en el mismo período.
En esa línea, Klaus Kaempfe, director regional de Portafolio Solutions de Credicorp Capital, dice que justamente el golpe al IPSA producido tras el estallido, explica el porqué este 2022 se puede considerar un buen año, y de hecho comenta que “sobre 5.000 puntos es “barato” en términos históricos, versus EEUU que estaba caro. En general cuando hay noticias malas o regulares y la bolsa no se cae, es reflejo de que hay poca especulación previa y que ya había pocas expectativas”.
Con todo, los mercados siguen atentos lo que ocurre en EEUU, y los próximos pasos de la Fed en su próxima reunión serán claves para determinar el devenir de los activos. En la última cita, el Banco Central de EEUU subió las tasas en 75 puntos base. El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha prometido una lucha incondicional contra la inflación.
Fuente:latercera.com
