El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicó esta mañana el IPC correspondiente al mes de agosto, el cual mostró una variación de 0,4%, cifra que se ubicó por encima de las expectativas del mercado. Con ese resultado, la inflación acumulada en doce meses llegó a 4,8% lo que, a su vez, representa el nivel más alto desde enero de 2016.
En el contexto de la recuperación de la economía, muchos son los productos que han subido de precio en el último año, pero nada como los gastos financieros.
Este ítem que mide la variación de las comisiones, gastos de administración y gastos de operaciones asociados a créditos hipotecarios, créditos de consumo, líneas de crédito, tarjetas de crédito bancarias, tarjetas de casas comerciales, apertura y mantención de cuentas corrientes, acumula un alza de 75% en doce meses.
Le siguen las flores con un aumento de más de 60% y cuyo escenario es más desafiante aún debido al impacto del cambio climático en el mundo agrícola.
El diésel completa el podio con un incremento en doce meses superior al 36% y que tiene como trasfondo el alza internacional del petróleo, el cual hace algunas semanas tocó máximos de seis años. Esto, hay que recordar, ha presionado el valor de las gasolinas que este año tocaron máximos históricos.
Pero en la coyuntura también hay productos que han bajado de precio. De acuerdo al INE, los bronceadores y bloqueadores solares bajan 18,8%, casi lo mismo que los zapatos de mujer, algo que tiene sentido en función de una temporada estival que estuvo marcada por las cuarentenas y las medidas de restricción en las playas.
Lo lógico, no obstante, es que estos productos empiecen a subir conforme nos acercamos al verano y las cosas vuelven a la normalidad.
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