Después de poco más de dos meses desde que anunciara su proceso de reorganización judicial, Multitiendas Corona S.A. recibió el apoyo de sus principales acreedores, lo que permitirá que la empresa pueda seguir adelante con su negocio.
Esto se logró luego de que, en la votación de hoy, la junta de acreedores de la cadena minorista aprobara la propuesta de acuerdo de reorganización judicial a la que se sometió voluntariamente el 10 de agosto, con el fin de asegurar su continuidad y el pago de la totalidad de los créditos, mediante la amortización de capital e intereses de acuerdo con su capacidad de pago y de generación de caja en el contexto del modelo de negocios de la compañía.
Además, el plan aprobado hoy permitirá a Corona mantener en sus puestos de trabajos a más de 1.600 personas que forman parte de la empresa, así como darle continuidad a un negocio que ha logrado calar de manera profunda en las preferencias de los chilenos, sobre todo en el segmento C3-D, con especial atención en las regiones del país.
Los hermanos Schupper, que controlan en partes iguales el 100% de la sociedad, acordaron prorrogar y rebajar el arriendo de locales que utiliza Corona, así como otros créditos, todo lo cual involucra más de $16 mil millones. Asimismo, acordaron generar las condiciones que faciliten la venta de la empresa, a efectos de apoyar la entrada de nuevos capitales y favorecer la continuidad operativa y comercial.
Corona mantendrá la misma estructura que tiene en la actualidad, sumando ahora la gestión de un interventor concursal, lo que fue aprobado en la junta deliberativa. Entre las atribuciones de este interventor estará el acceder a la información contable de la compañía, y otra serie de facultades destinadas al cumplimiento del acuerdo. También la junta aprobó la designación de una comisión de acreedores, conformada por los cinco representantes de los mayores acreedores bancarios.
Cristián Fuenzalida, gerente general de Corona, agradeció a todos los acreedores por tener la visión de apoyar la propuesta de la compañía, que buscará responder a cada una de las acreencias. También hizo extensivos los agradecimientos a los accionistas, al directorio, a los asesores y muy especialmente a todos y cada uno de los colaboradores de Corona. “Son ellos los que en medio de esta pandemia y sus duros efectos económicos han respondido al desafío de salvar su fuente laboral y de tener todos los sentidos puestos en hacer de Corona la gran empresa que es”, dijo el ejecutivo.
Cabe recordar que el proceso fue liderado desde lo legal por el estudio Nelson Contador & Cía., que se especializa en reestructuraciones de empresas.
Modelo VCT
Con el respaldo de los acreedores, Corona se enfocará en ejecutar y profundizar el modelo VCT (Vestuario, Calzado y Telefonía), el cual considera una adecuación hacia un formato de tiendas de menor tamaño, el que -previo a la pandemia- mostró resultados favorables tanto en preferencia de los consumidores como en el desempeño económico.
Paralelamente, la compañía seguirá trabajado en potenciar este modelo en conjunto con su canal e-commerce, buscando eficiencias complementarias a nivel de mejoramiento de su tecnología, gestión, procesos y logística, así como en la implementación de click and collect en toda la cadena, lo que ya ha introducido mejoras sustanciales en la afluencia de público a nivel remoto y presencial.
En términos de marca, Corona cuenta con un importante respaldo y reconocimiento. Recientemente logró el tercer puesto del Índice de Calidad de Marca (categoría multitiendas, Chile 3D de GFK, Adimark), además de haber obtenido un lugar entre las 200 marcas ciudadanas del país, según Cadem. El posicionamiento de Corona la ha destacado como una compañía inclusiva, transparente y cercana hacia sus clientes.
De esta manera, Corona volverá a centrar su estrategia en el negocio y a atender a miles de familias de los sectores más vulnerables del país, con una oferta de calidad, diferenciada y a precios competitivos, y de paso dar continuidad a un negocio fundado hace casi 70 años en la ciudad Concepción, cuando don Leonardo Schupper, un visionario inmigrante holandés, dio vida a Corona.
