Un año después de la elección de Lula para su tercer mandato presidencial en Brasil, en una competencia reñida con Jair Bolsonaro, el sector de Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) analiza con satisfacción el progreso de sus promesas de campaña. Lula presentó una serie de propuestas que incluían garantizar la conectividad de calidad en todo el país, una nueva legislación para los trabajadores de aplicaciones, la restauración de los fondos y agencias de promoción de la ciencia, la tecnología y la innovación, y la reindustrialización del país a través de una «reforma tributaria solidaria, justa y sostenible».
Marcos Ferrari, presidente de Conexis Brasil Digital, destacó los avances significativos en el último año, especialmente en la priorización de la conectividad y la inclusión digital como factores fundamentales para el desarrollo económico, señalando el eje de Inclusión Digital y Conectividad en el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC).
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El renovado PAC, con un presupuesto de casi 28 mil millones de reales, se centra en promover la conectividad y la tecnología, con 18 mil millones de reales destinados específicamente a la expansión de las redes móviles 4G y 5G.
En el ámbito laboral, Lula prometió abordar la situación precaria de los trabajadores de entrega y transporte, aunque no se llegó a un consenso sobre temas como la remuneración mínima, la seguridad social y la jornada laboral.
En julio, el Consejo Nacional de Desarrollo Industrial (CNDI) estableció directrices para una nueva política industrial que busca la reindustrialización completa de Brasil con una inversión de 106 mil millones de reales.
A pesar de los ajustes necesarios, la reforma tributaria se considera esencial para fomentar la conectividad y el avance de la economía digital en Brasil, aunque aún debe ser aprobada en su totalidad por el Senado y la Cámara.
Con información de DPL News
