El impacto del consumo de carne en Brasil: tendencias reveladoras

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El consumo de carne en Brasil trasciende la mera alimentación para convertirse en un componente fundamental de la vida cotidiana, ocupando prácticamente la mitad del plato de los brasileños. A pesar de que el 69% de los hogares enfrenta endeudamiento, el gasto en proteínas, considerado esencial, ha experimentado un aumento significativo. Este fenómeno se refleja en el hecho de que el consumo de carne representa el 34% del gasto en bienes de consumo masivo y se manifiesta en el 47,4% de las ocasiones alimentarias.

Durante los 12 meses hasta junio de 2023, esta tendencia se tradujo en una facturación de R$ 83 mil millones, con 60 millones de hogares compradores que destinaban, en promedio, 116,44 reales mensuales al consumo de carne. La reanudación de las visitas a los puntos de venta impulsó a los consumidores más jóvenes y a las clases socioeconómicas menos favorecidas a aumentar tanto el volumen como la frecuencia de sus compras.


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En términos de variedades, las proteínas frescas, especialmente la carne vacuna y los huevos, dominan el 68% del volumen total, mientras que la mortadela destaca entre los alimentos procesados. Sorprendentemente, el 21% de las familias brasileñas poseen al menos ocho proteínas diferentes simultáneamente en sus hogares.

Las fechas conmemorativas también desempeñan un papel crucial en las preferencias de consumo, con aumentos notables en la demanda de pavos a finales de año y de pescados y mariscos durante la Semana Santa. Entre los motivos que impulsan las compras de proteínas, el sabor, el placer y la practicidad ocupan un lugar destacado, generando preferencias específicas en cuanto a categorías y preparaciones.

Además, se observa un resurgimiento del consumo de proteínas fuera de casa, especialmente en forma de snacks listos para consumir, impulsado por los consumidores más jóvenes y aquellos pertenecientes a la clase social AB. La diversificación en las ocasiones de consumo, desde la hora del desayuno hasta las comidas principales, ha contribuido a esta tendencia.

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Con información de Kantar