La aerolínea Amaszonas, con sede en Bolivia, enfrenta una situación de suspensión de vuelos que ha generado un gran impacto en el transporte aéreo en el país y en el sector turístico. La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) de Bolivia ha suspendido las matrículas de la aerolínea, lo que ha llevado a la interrupción de sus operaciones. El conflicto, inicialmente entre Amaszonas y GY Aviation Lease 1816, propietaria de la flota, ha evolucionado para involucrar al gobierno boliviano.
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La aerolínea, respaldada por un amparo judicial, acusa a las autoridades bolivianas de no respetar decisiones legales y de afectar su capacidad para operar. Por su parte, el gobierno de Bolivia sostiene que la suspensión se debe a la falta de un contrato vigente, lo que plantea preocupaciones sobre la seguridad aérea y la responsabilidad en caso de accidentes.
La cancelación de vuelos hasta el 15 de agosto ha generado incertidumbre entre los pasajeros afectados, así como desafíos financieros para la aerolínea, que debe lidiar con indemnizaciones, reubicación de pasajeros y devolución de pasajes. Esta situación también impacta negativamente en la conectividad interna e internacional de Bolivia, así como en el turismo, especialmente en el caso de los viajeros extranjeros.
La fecha del 15 de agosto marca un punto crucial, ya que se revisará el amparo favorable a la empresa por parte de la Sala Tercera de La Paz. Amaszonas espera que esta revisión conduzca a la levantada de la suspensión y permita la reanudación de sus vuelos. Mientras tanto, la incertidumbre sobre el futuro de las operaciones de la aerolínea persiste, y tanto el gobierno como la empresa deben buscar una solución para resolver este conflicto y restablecer la normalidad en el transporte aéreo en Bolivia.
Con información de Ricardo Delpiano
Fuente: Aero-Naves.com
