Según publica lanacion.com.ar A lo largo de la última semana se han llevado adelante, en el marco del C 40 en la Ciudad de Buenos Aires, reuniones técnicas paralelas, donde quedan en evidencia las oportunidades y los retos que enfrentan las grandes ciudades y capitales del mundo en la búsqueda de un desarrollo carbono neutral y sustentable a futuro. C40 Cities es la red global de ciudades que busca encontrar soluciones colectivas para combatir la crisis climática, representando a más de 70 millones de ciudadanos, y a una cuarta parte de la economía mundial.
Dado que los efectos del cambio climático no son ya materia de debate y que la balanza financiera de los países participantes se encuentra amenazada por las consecuencias adversas sobre sus recursos, la necesidad de proponer modelos de triple impacto (ambiental, social y económico) resulta clave para proponer soluciones colectivas en la sociedad que compartimos. El cambio cultural en este sentido está ocurriendo y se ve en las generaciones y delegaciones jóvenes presentes, que empujan y reclaman mayores reacciones del sistema convencional.
Dificultades asociadas e inesperadas, como la actual crisis energética europea, generan mayor presión sobre la necesidad de impulsar una matriz alternativa y amigable con el ambiente y el hábitat que, en definitiva, es la casa común de la humanidad (con responsabilidades comunes, pero diferenciadas.)
Aun así, la ciencia sigue abriendo oportunidades de desarrollo limpio y reducciones de emisión por medio de nuevas opciones como proyectos de hidrógeno verde, para acumular la generación de energías renovables -eólica y solar- y de este modo almacenar recursos a futuro. Para no alimentarse únicamente de recursos fósiles, la Argentina puede posicionarse con una oportunidad, sobre la base de recursos limpios. Un esquema de reglas claras y actualizadas en este sentido resultará clave para la apuesta a este tipo de iniciativas.
Nuevos enfoques como el financiamiento y empleo verde, un transporte eficiente, perspectivas de ciudades de bienestar con mayor acceso a la naturaleza, la movilidad eléctrica y sustentable y un mejor manejo y clasificación de residuos que minimicen la huella de carbono resultan piedras fundamentales para avanzar hacia un proceso de transición justa, y descarbonización.
Por Maximo Cafici, Especialista en Derecho Ambiental. Participante del C40 en ocasión de los encuentros de Rotterdam y Buenos Aires
