Walmart se está acercando para ayudar a los empleados y las familias de las víctimas del tiroteo después del tiroteo en la sala de descanso de su tienda en Chesapeake, Virginia, la semana pasada.
El gigante minorista está apoyando a las familias con gastos funerarios, de viaje y otros, escribió el presidente y director ejecutivo de Walmart en EE. UU., John Furner, en una nota a los empleados de la empresa en EE. UU. (El tiroteo cobró la vida de seis empleados e hirió a otros cuatro, y dos permanecen en el hospital).
Además, Walmart ha establecido un sitio físico donde los empleados “pueden reunirse, conectarse y hablar con consejeros”. Todos los empleados y sus familias también tienen acceso a recursos confidenciales de apoyo de salud mental sin costo alguno.
Furner señaló que la tienda de Chesapeake está cerrada y permanecerá así en el futuro previsible. A todos los empleados se les seguirá pagando independientemente de sus horarios planificados.
“Entendemos que este fue un momento que nunca se puede olvidar, particularmente para los asociados sobrevivientes de la Tienda #1841”, escribió Furner. “Trabajaremos en estrecha colaboración con el equipo para decidir cómo y cuándo podemos remodelar y reabrir de una manera que los ayude a seguir adelante”.
La Fundación Walmart tiene la intención de contribuir $ 1 millón al Fondo de esperanza y curación de United Way of South Hampton Roads, que apoyará a los afectados por el tiroteo y a la comunidad de Chesapeake en general. Walmart proporcionará una igualación de 2:1 para las donaciones de los asociados a este fondo como parte de su campaña Season of Giving Back.
“Muchas gracias por apoyarse mutuamente durante este tiempo impensable”, escribió Furner. “Sobre todo, expresamos nuestro más sentido pésame y apoyo a quienes perdieron a un ser querido el martes pasado. Lo sentimos mucho, y estamos aquí para ti”.
El mismo día que Walmart publicó la carta, un sobreviviente del tiroteo en la tienda de Chesapeake presentó una demanda de $50 millones contra la compañía por supuestamente seguir empleando al tirador, el supervisor de la tienda Andre Bing , «que tenía propensiones conocidas a la violencia, amenazas y comportamiento extraño.»
Donya Prioleau , reponedora y entrenadora nocturna en la tienda, dijo que presentó una queja por escrito a Walmart con respecto al comportamiento “extraño” de Bing meses antes del tiroteo, según una presentación en el tribunal de circuito de Chesapeake, informó CNN .
