Dado que el robo en las tiendas sigue siendo un gran problema para Walmart, un informe dice que tanto los empleados como los clientes señalan un factor como facilitador particular para los ladrones.
Más de 100 clientes y empleados (tanto actuales como antiguos) dijeron a Business Insider que, como medida para reducir las pérdidas, Walmart debe dejar de depender del autopago. Eso se produjo en respuesta a que el director ejecutivo de Walmart, Doug McMillon, le dijo a CNBC a principios de este mes que la tasa de pérdida había llegado a un punto en el que podría provocar el cierre de tiendas. Si bien Walmart no comentó sobre la proporción de cajeros por carriles de autopago en sus tiendas, un empleado anónimo de una tienda en Spokane, WA, le dijo a Insider que la tienda había reducido drásticamente los carriles de pago atendidos a favor del autopago.
El fenómeno de defraudar a los autopagos para robar en tiendas no es nuevo, y para 2018 la práctica se había generalizado tanto que The Atlantic informó que surgió una jerga entre los ladrones para describir diferentes trucos. Los ladrones desvergonzados usan el término «el truco del plátano» para marcar un artículo caro a granel como uno más barato y se refieren al intercambio de etiquetas de precio como «el cambio».
Los informes han postulado que hasta el 20 por ciento de las personas que usan el autopago han robado algo mientras lo usaban.
En el último año, se han informado ampliamente casos de soluciones de pago desatendidas aún más nuevas que son propensas al robo.
Por ejemplo, Wegmans a principios de este año, debido a una tasa insostenible de hurtos, cerró su aplicación SCAN, que permitía a los compradores escanear productos y salir de la tienda sin visitar una caja registradora.
Sin embargo, los pequeños hurtos desenfrenados no son la única razón del aumento en el número de pérdidas en los últimos años. También se ha informado ampliamente que el crimen minorista organizado ha alcanzado niveles epidémicos. El crimen minorista organizado consiste en agentes que trabajan para bandas criminales que roban grandes cantidades de productos de los minoristas, a veces mediante ataques violentos de fuerza bruta, para que las redes puedan revender el producto en línea.
El crimen minorista organizado experimentó un aumento entre 2021 y 2022, según la Cámara de Comercio de EE . UU . En 2020, ya había subido un 50 por ciento en cinco años, lo que les costó a los minoristas $ 700,000 por $ 1 mil millones en ventas.
