El gobierno de Uruguay ha anunciado una nueva medida que impactará en el costo de entrar o salir del país por vía marítima. Esta medida consiste en la instalación y mantenimiento de un sistema de control fronterizo para pasajeros que ingresan y egresan de Uruguay a través de barcos. Las empresas navieras, Buquebus y Colonia Express, se han opuesto a esta decisión, argumentando que aumentará los costos para los pasajeros. Según el contrato, este servicio de seguridad tendrá una duración de 10 años y será financiado por los propios pasajeros, quienes pagarán un adicional de 2,10 dólares más IVA por su implementación.
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El sistema de control fronterizo tiene como objetivo registrar a todas las personas que cruzan la frontera uruguaya, ya sea por vía marítima, terrestre, fluvial o aérea, abarcando un total de 43 puntos fronterizos. Este sistema permitirá el análisis del nivel de riesgo de los pasajeros y la búsqueda de ciudadanos uruguayos y extranjeros en listas de Interpol, mejorando así la seguridad y la detección de actividades ilícitas.
La financiación de este sistema provendrá del pago del «servicio de seguridad» por parte de los pasajeros de barcos, el cual será retenido por las empresas navieras. A pesar de las objeciones presentadas por las compañías de transporte fluvial, el gobierno ha decidido seguir adelante con esta medida, que busca reforzar los mecanismos de fiscalización y seguridad en la frontera uruguaya.
El proyecto surgió de una propuesta presentada por Dafiway SA, una empresa privada que fue aceptada por el Gobierno en 2018. A pesar de observaciones y objeciones, el Gobierno ha reiterado la importancia de implementar este sistema de control fronterizo para mejorar la seguridad y la fiscalización de los pasajeros que ingresan y egresan del país.
Con información de Nicolás Delgado de El País
