Uruguay está implementando medidas para abordar su creciente tasa de suicidios, que el año pasado fue más del doble que el promedio de América Latina, alcanzando 23 suicidios por cada 100,000 personas, la cifra más alta registrada. Para enfrentar esta crisis, el país planea ofrecer antidepresivos de manera gratuita y establecer centros de salud mental y social dirigidos a jóvenes. El Gobierno ha presentado un plan de salud mental y adicciones, respaldado por un presupuesto de 20 millones de dólares, que se espera que comience a operar en 2024.
Vea también: Preocupación por la reventa de medicamentos argentinos en Uruguay
Uruguay se encuentra en desventaja en comparación con la tasa promedio regional de América Latina y Estados Unidos, que fueron de 9 y 14 suicidios por cada 100,000 personas respectivamente. El plan propuesto incluye la distribución gratuita de medicamentos antidepresivos como escitalopram, fluoxetina y sertralina, así como la expansión de los centros de tratamiento de adicciones y el aumento del subsidio para la terapia psiquiátrica.
El enfoque también se centra en la prevención temprana, con la apertura de centros comunitarios de inclusión social para jóvenes que ofrecerán programas deportivos, educativos y sesiones de terapia grupal. Uruguay busca entender y abordar los múltiples factores que contribuyen a las tasas de suicidio más altas en la región, que van desde aspectos sociales hasta cuestiones personales, biológicas, culturales y psicológicas.
Expertos en salud mental respaldan las medidas propuestas y enfatizan la importancia de fortalecer todo el sistema de salud para un enfoque integral. La crisis de salud mental se ha vuelto más relevante en todo el mundo, especialmente debido a la pandemia de COVID-19, y se ha demostrado que aumentar la inversión en salud pública y la disponibilidad de profesionales médicos puede tener un impacto positivo en la reducción de las tasas de suicidio.
Para mayor información, haz clíck aquí
Artículo de: , y
