Según publica el portal el economista
La cadena de moda y ropa para el hogar alemana KiK ha comenzado su expansión en la Península ibérica con la reciente apertura de su primera tienda en la localidad portuguesa de Pedroso.
Tras este estreno, la cadena alemana tiene previstas más aperturas en el área metropolitana de Oporto, al sur de la capital, Lisboa, y en el Algarve.
Con un crecimiento continuo en el sur de Europa, KiK cuenta desde 2017 con una amplia presencia en Italia, además de Europa Central y del Este, hasta sumar un total de 14 países.
«KiK es una empresa minorista en fuerte desarrollo. La expansión en nuevos mercados forma parte de nuestra estrategia de crecimiento, convirtiendo a KiK en los últimos años en una de las principales empresas de ropa de Europa», explica Fernando Strubing Gomes, director general de España y Portugal de KiK.
Bajo el lema «El cliente es el rey», este proveedor de textiles básicos ofrece desde 1994 ropa de mujer, hombre, niño y bebé de calidad a precios económicos, además de artículos de regalo, juguetes, productos de belleza, accesorios y textiles para el hogar. La empresa genera unas ventas netas anuales de 1.900 millones de euros gracias a sus más de 4.000 puntos de venta.
