Cualquier falla de seguridad, por más pequeña que sea, tiene cada vez más impacto en las organizaciones y en el devenir cotidiano de las personas. Si con 5G serán las cosas las que estén principalmente conectadas, qué sucederá cuando haya un ataque sobre algún servicio que impacte de manera masiva. El caso de Colonial Pipeline demostró cómo de un momento a otro es posible afectar a una empresa y a sus consumidores. En América latina, con excepción de Costa Rica, la ciberseguridad pareciera no tomar la suficiente relevancia aún, ni siquiera cuando tres de sus países, Brasil, México y Colombia, se encuentran en el top 20 de los más atacados a nivel global, de acuerdo al Mapa de Ciberamenazas de Kasperksy.
Santiago Pontiroli, analista de seguridad de Kaspersky, anticipó que el advenimiento de 5G y la Internet de las Cosas (IoT) como desarrollo no visto hasta ahora incrementa las preocupaciones porque la exposición será mayor. Y que habrá que estar en alerta permanente para anticiparse a los eventos, lo que a su vez implicará darle a la ciberseguridad la relevancia que merece.
5G promete conectar todo. ¿Qué nuevos riesgos traerá la tecnología para el ecosistema 5G? ¿Veremos con más frecuencia casos como el de Colonial Pipeline?
La 5G ha llegado y será la fuerza vital de los dispositivos IoT. Creará muchas oportunidades para las ciudades inteligentes, automóviles autónomos, hogares inteligentes, la industria de la salud, la transmisión simultánea, el streaming de vídeo HD, entre otros. Y aunque 5G servirá como base para muchas tecnologías futuras, las preocupaciones por la seguridad son ineludibles. Como todo el sistema en el que vivimos está conectado, esto definitivamente nos expondrá a más riesgos, ya que cada vez hay más dispositivos conectados a la red. Si un elemento es hackeado, muchos más pueden verse afectados.
Conoce más aquí
