- La transición gemela, que está imperando en todo el mundo, logra que las empresas sean más rentables, pero no a cualquier precio, sino que aportando a la sustentabilidad del planeta a través de la integración de tecnología digital o viceversa.
La transformación digital ya dejó de ser sólo la digitalización de procesos que antes eran manuales o la incorporación de tecnologías que aceleran las formas de trabajo. Actualmente en el planeta se habla de “Twin Transition”, el paradigma de las dos más importantes revoluciones, la digital y la sostenible, que están transformando al mundo y la innovación.
Así, la transformación digital se enfoca tanto en la optimización del servicio y la empresa como en establecer un vínculo positivo con el medioambiente y la sustentabilidad.
“Ya no hay dudas de que la transformación digital y la sostenibilidad son estrategias centrales fundamentales en la agenda corporativa y resulta difícil pensar un futuro sin ambas integradas”, afirma Paula Benardoni, Líder Especialista en Innovación y People Centricity en OLIVIA, consultora global experta en transformación organizacional, quien agrega que “quienes sean capaces de hacerlo de forma exitosa, tendrán sin duda una ventaja frente a otros y mayores probabilidades de triunfo”.
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La transformación gemela —digital y sostenible— busca combinar la digitalización con la integración de la sostenibilidad en diferentes sectores, teniendo como objetivo volver las industrias más eficientes y, a la vez, generar un menor impacto en la triple cuenta de resultados (económicos, sociales y medioambientales).
Por ejemplo, en el sector de la energía, esto puede implicar la integración de fuentes renovables, la optimización de la gestión de la demanda y la mejora de su eficiencia. En la agricultura, permitir una gestión más eficiente de los recursos hídricos y el uso de técnicas de cultivo sostenibles. En la movilidad, el fomento del transporte público y la creación de sistemas menos contaminantes.
Twin es el concepto perfecto para manifestar que estas dos transiciones tienen que darse al mismo tiempo y en sincronía. Y lo cierto es que las estrategias de sostenibilidad y transformación digital aportan valor y beneficios reales.
Este enfoque se basa en la idea de que la transformación digital puede ayudar a mejorar la sustentabilidad, permitiendo una gestión más eficiente de los recursos, una reducción de la huella ambiental y mejorar la calidad de vida de las personas. Y también a la inversa: en la idea de que sustentabilidad, marcando un norte estratégico, igualmente está al servicio de la transformación digital.
Se trata, entonces, de dos transiciones que se unen en una suerte de simbiosis: la transición ecológica y la digital que, siendo a la vez retos estratégicos para las organizaciones, se relacionan y combinan para que producir impactos positivos y aumentar la competitividad de los negocios. “Es una transformación que dota a las empresas de grandes beneficios y valor”, sostiene Paula Benardoni.
La profesional explica que “las compañías que implementen esta doble transición tienen más probabilidades de tener un mejor desempeño a futuro. De hecho, según el Foro Económico Mundial (WEF), las organizaciones que desplegaron iniciativas medioambientales en los últimos años crecieron cerca del 15% anual, ahorrando casi US$ 3.700 millones. El mismo organismo estima que el 70% del nuevo valor creado en la economía se basará en modelos comerciales de plataformas habilitadas digitalmente, durante la próxima década”.
Pensemos, por ejemplo, cuánto tiempo, dinero y huella de carbono ahorraríamos si en obras de gran escala probáramos el mobiliario y otros equipamientos estructurales con diseños de realidad aumentada a partir de hologramas. O cuánto podrían reducirse los recursos necesarios para la producción de un automóvil si se imprimieran en 3D con polímeros de minerales naturales. Dos ejemplos de la simbiosis entre la transición ecológica y digital.
Hoy, son varios los países de Europa, de Asia y América que están liderando la transformación gemela en diferentes sectores, y están impulsando el desarrollo de prácticas más sustentables y eficientes a través de la innovación tecnológica (Inteligencia Artificial, Blockchain, impresión 3D, construcción circular y robótica, entre otras) y la colaboración.
De hecho, Chile se propuso el objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 y, para ello, los ministerios sectoriales evaluaron un conjunto de medidas, como el cierre de centrales eléctricas de carbón, la promoción de la movilidad eléctrica y el aumento de la cobertura forestal, implementando el uso de energías renovables y de tecnologías digitales en diversos sectores, incluyendo la minería, la agricultura y el transporte.
“Twin Transition puede ser el método más eficaz para garantizar el futuro de nuestra sociedad, optimizando la protección al medioambiente y consiguiendo un crecimiento económico sostenible y justo para todos”, finaliza la experta de OLIVIA.
