La sustitución del parque de furgonetas de Madrid ahorraría 1,5 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera anualmente, el equivalente a todo el CO2 que emite el sector pesquero español. Esta fue una de las conclusiones del II Webinar del VII Foro Nissan, celebrado el pasado 29 de octubre, centrado en el reparto de última milla y la movilidad compartida como dos claves para impulsar una movilidad más sostenible.
El comercio electrónico ya venía siendo un sector en auge antes de la pandemia, pero el Covid-19 ha acelerado este proceso y, actualmente, ya es uno de los sectores que mueve las economías de los distintos países. En este sentido, el incremento del reparto de última milla y los viajes en furgonetas se han multiplicado, de manera que, con un parque tan antiguo de furgonetas en España, con más de 14 años de antigüedad, las emisiones de CO2 a la atmósfera se han incrementado de manera considerable. Por ello, rebajar la edad del parque de furgonetas y sustituir las mismas por tecnologías cero emisiones debe ser una prioridad para las diversas instituciones públicas.
El denominador común de los participantes en el debate online fue la necesidad de alcanzar una intermodalidad mayor entre los distintos modos de transporte, con el fin de acelerar el proceso hacia una movilidad sostenible y limpia.
El Ayuntamiento de Madrid ha apostado por rejuvenecer el parque de furgonetas de Madrid, dotando de una línea específica para este sector en su Plan 360º, de manera que la compra de una furgoneta eléctrica tiene una ayuda de hasta 8.000 euros, según explicó Lola Ortiz, directora general de Planificación e Infraestructuras de Movilidad del consistorio madrileño. Del mismo modo, Juan Sandes, Chief Operating Officer GLS Spain/COO, puso el punto de inflexión en la adquisición por parte de las grandes compañías de vehículos sin emisiones, pero destacó que la movilidad ha de ser sostenible desde el punto de vista ambiental y económico. Asimismo, subrayó que «la movilidad no ha de ser solo el objeto de unos pocos, sino que toda la sociedad ha de estar implicada».
Por su parte, Celia Ferrero, vicepresidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), solicitó medidas de apoyo al colectivo de autónomos, ya que son la base de la movilidad sostenible, y sin una renovación de los vehículos que integran este grupo será muy difícil avanzar hacia la sostenibilidad. También puso el acento en la fiscalidad ligada a la actividad del autónomo como una de las claves para acelerar el cambio.
El otro gran aspecto para acelerar la reducción de emisiones, además de la renovación del parque de furgonetas, es el carsharing, un modelo en alza en determinadas ciudades grandes como Madrid o Barcelona. En este sentido, Agustín Muñoa, COO de Zity, se refirió al mismo como “una clara oportunidad para ayudar a las ciudades a reducir su huella de carbono y como palanca de alcanzar objetivos medioambientales, proporcionando además la movilidad que nos pide la sociedad”. Agustín Muñoa insistió en la necesidad de seguir incrementando la comunicación sobre los aspectos positivos de la electrificación ligados a modelos de negocios nuevos como el carsharing.
