Sostenibilidad: Slow Fashion la tendencia que se viene

Son tiempos difíciles para la industria de la indumentaria y la pandemia golpea fuertemente a la moda que una vez más tratará de reinventarse a través de la Moda Lenta.

La moda lenta es un modo de pensar y concebir a la moda desde un hacer consciente, ético y respetuoso, con el medio ambiente, los trabajadores y los consumidores.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

La moda rápida es lo que tenemos en la actualidad, ya que cada vez más rápido cambian las tendencias, y lo que está de moda en otoño ya no sirve (según las tendencias) para el invierno, no teniendo en cuenta al medio ambiente ni a los trabajadores con salarios injustos.
La moda lenta es una forma de identificar soluciones de moda sostenibles, basadas en nuevas estrategias de diseño, producción, consumo, uso y reutilización, que están surgiendo junto al sistema global de la moda y que le plantean un desafío potencial. Abarca toda la gama de movimientos de moda sostenible, ecológico, verde y ético. Este movimiento es otro modelo de negocio que se centra tanto en frenar el consumismo como en respetar el medio ambiente y la ética.

En pocas palabras los que plantean una moda lenta tratan de decirnos que nos conectemos con la naturaleza, que reciclemos prendas viejas, o en desuso, que usemos de manera responsable los recursos naturales cuidando de no contaminar y aprovechar al máximo las materias primas.

A diferencia de la moda rápida, la producción lenta de la moda garantiza una fabricación de calidad para alargar la vida útil de la prenda. Desarrollar una prenda con una conexión cultural y emocional también es pertinente para el propósito detrás de la moda lenta: los consumidores conservarán una prenda de vestir por más de una temporada si se sienten conectados emocional o culturalmente con la prenda de vestir. Además tiene un costo de producción diferente y no puede producir tanto en cantidad, no puede competir con los productos de la moda rápida producidos en masa que utilizan mano de obra y recursos baratos para maximizar las ganancias. La moda lenta es muy local y utiliza materiales y tejidos de alta calidad. Vemos como la moda lenta no puede producir tanta moda rápida debido a que el proceso de producción es muy diferente.

La moda lenta propone una desaceleración, un respiro ante la excesiva producción y el consumo desmedido instaladas por la moda rápida, aquellos que llevaron a que la industria de la moda sea la segunda más contaminante del planeta. Bajo esta mirada, el tiempo que cada proceso necesita es sumamente valorado, permitiendo que cada integrante de la cadena de valor pueda realizar su actividad desde una mirada ética y responsable, considerando tanto el impacto sobre el medio ambiente como el impacto humano generados.

Desde el lugar de compradores podemos aportar a lo grande para una moda lenta y sustentable, como fijarnos en los precios, comprar cuando necesitamos realmente o reutilizar prendas viejas que no usamos, revalorizar la indumentaria dándoles otra oportunidad, desde cunitas para mascotas hechas de retazos o prendas viejas, hasta rellenos de almohadones con telas cortadas. Abrí tu creatividad y ¡cuidemos el único planeta que tenemos!

Banner_azules
Reciba las últimas noticias de la industria en su casilla:

Suscribirse ✉