Según publica glamor.mx Hablemos de diseñadores sustentables en la moda. Esta temporada ha habido momentos de optimismo e innovación que dejaban entrever un futuro más considerado para una industria que a menudo es señalada por ser una de las más contaminantes del mundo.
En la actualidad, el British Fashion Council no ha adoptado un régimen tan estricto. ‘La Semana de la Moda de Londres acoge una mezcla de marcas establecidas y emergentes, por lo que no es factible establecer una norma de sostenibilidad única para todos sin alienar a las empresas más pequeñas’, declaró a GLAMOUR Caroline Rush, Directora General del BFC. ‘Dicho esto, nuestro trabajo con el Plan de Acción para la Sostenibilidad de la Semana de la Moda de Copenhague ha dado forma a nuestras normas mínimas y de bronce para los diseñadores participantes en la BFC NEWGEN. Cada una de las normas mínimas y de bronce se basa en la Agenda 2030 de la ONU para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y se aplica a siete áreas de interés del ciclo de vida de una prenda: dirección estratégica, diseño, elección inteligente de materiales, fabricación y distribución, condiciones de trabajo, compromiso de los consumidores y desfiles de moda. También animamos a todos los miembros de nuestra red a tomar medidas tangibles comprometiéndose con iniciativas como la Carrera hacia Cero, uniéndose a la CMNUCC y al Pacto de la Moda y apoyando la Iniciativa de Mercados Sostenibles. A través del Foro del Instituto de la Moda Positiva, un acto anual centrado en la acción, podemos seguir los avances y supervisar los compromisos adquiridos por nuestra red’, añadió.
Los diseñadores más impactantes de esta temporada dieron grandes pasos –o reiteraron su punto de vista sustentable– en la creación ética esta temporada. Caroline llamó nuestra atención sobre la piel biodegradable de hoja de té de Ray Chu y la piel vegana de Jakke, ambas opciones con futuro. Estos son los diseñadores que se tomaron en serio la sostenibilidad para el otoño invierno 2023:
En una colaboración con Lee Jeans, la diseñadora rumana ha reutilizado su mezclilla en desuso y lo ha convertido en una serie de prendas inspiradas en el efecto 2000: bralettes, faldas ajustadas y mangas desmontables con un ribete de imitación de piel de oveja en desuso. Sólo el 1% de la ropa se recicla y el calzado es aún más difícil de eliminar, pero Sarca recoge zapatos, zapatillas y tejidos en desuso y los reconstruye con un efecto devastador. Para el otoño/invierno 2023, además de las piezas vaqueras, había botas que utilizaban chaquetas vintage de nailon acolchado y kitten heels adornados con pieles de imitación de fin de rollo. Los mocasines de punta cuadrada utilizaban cuero de desecho y malla deportiva no deseada, mientras que los tacones rojos de charol con lazos envolventes por la pierna y las botas deportivas híbridas parecían como nuevas a pesar de –o quizás debido a– sus orígenes de desecho.
Los vestidos de camisetas empalmadas de Conner Ives se han convertido en un favorito del street style, pero para el segundo desfile del diseñador estadounidense en la LFW, fue más allá de la ropa de día para crear una colección completa que se centró en las prendas ‘reconstituidas’. Los pañuelos de seda, ya usados, se convirtieron en vestidos para llevar sobre pantalones de mezclilla… La piel sintética reciclada, la mezclilla y el jersey se transformaron en jeans y piezas de patchwork… Si no se trataba de algo viejo, Ives utilizó tencel, un material más considerado, para camisas y sastrería. Ver artículos reciclados en la pasarela de una de las marcas más importantes del calendario debería empujar a otros creativos a pensar más allá de lo nuevo.
Defensora del upcycling desde hace mucho tiempo, se centró anteriormente en la reutilización de ropa deportiva, pero esta temporada los vestidos, trajes y zapatos han sido el centro de una colección más glamurosa. La diseñadora Ahluwalia, que siempre elige tejidos orgánicos o reciclados, ha reforzado esta temporada su enfoque transparente y ha creado códigos QR en cada prenda, que revelan de qué está hecha, en qué se inspira y dónde se ha fabricado. Con la trazabilidad y la transparencia como principales objetivos de sustentabilidad, se trata de una innovación pionera que debería extenderse a toda la industria. Lo apoyamos.
Esta marca también aportó procesos más conscientes a su colección. El encaje se tejió a partir de retales y los restos de la temporada anterior (como lana y cintas) se convirtieron en nuevas tiras de tejido cristalizado. Los accesorios impresos en 3D (como los bonitos bolsos de cuentas) reducen los excesos, ya que sólo se utiliza lo necesario para imprimir cada pieza, mientras que las chanclas que las modelos llevaban para caminar por la pasarela salpicada de pétalos de rosa, estaban fabricadas con TPU biodegradable, lo que garantiza que, al final de su vida útil, el artículo tendrá el menor impacto ambiental.
Las piezas hechas por encargo reducen los residuos que generan las prendas producidas en masa. Todas las piezas de edición limitada están fabricadas con materiales recuperados o tejidos producidos de forma ética y tienen un aspecto tan devastador como las piezas de alta costura más intrincadas.
Reformular el pensamiento en torno a la moda, la novedad y el consumo es esencial para hacer avanzar la industria. Los diseñadores más innovadores y sustentables de la Semana de la Moda de Londres demuestran que hay múltiples maneras de fusionar la moda y garantizar su función en el futuro. Descubrir algo en la pasarela y tener que esperar hasta el otoño para que llegue a las tiendas puede parecer doloroso cuando se compra con un clic y se entrega el mismo día, pero tomarse su tiempo es una de las mejores maneras de comprar de forma sustentable. Es la antítesis del fast fashion, y esta Semana de la Moda de Londres ha demostrado por qué los diseñadores británicos están cambiando las reglas del juego.
