Retail Jobs: 10 tips para mejorar tu empleabilidad

 

A todos los mexicanos, dentro de la categoría laboralmente activa, nos ha tocado vivir una o varias veces la experiencia de empezar a trabajar en una empresa nueva. No importa si es tu primer empleo o ya has pasado por alguno con anterioridad, siempre y sin excepción, aparece ese cúmulo de emociones, expectativas, metas e incertidumbre de lo que esta nueva etapa significará para ti.

En México, la rotación de personal es uno de los principales problemas en el ámbito laboral, ya que nos situamos entre los ocho países con mayor número de movilidad con sus empleados. El porcentaje varía de un sector a otro; es decir, en el sector de manufactura o tiendas de conveniencia, presenta menos movilidad a comparación con el restaurantero.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

Actualmente, las empresas y corporativos están más enfocados en contratar personal bien capacitado en lo técnico y en lo humano; con habilidades que les permita delegar a sus equipos de trabajo actividades que requieran actitud, motivación, liderazgo, herramientas para hablar en público, entre otras.

Este domingo, quiero compartir algunos sencillos consejos para todas aquellas personas que están por iniciar un nuevo trabajo, si eres joven y es tu primer acercamiento al mundo laboral, toma nota de ellos; y si no es tu primera experiencia, te invito a que los leas con detenimiento y hagas una retroalimentación sobre aquellos que has hecho con anterioridad y los que no, en este nuevo empleo podrás poner en práctica. Por lo tanto, mi recomendación es: Desarróllate y ocúpate en practicar los siguientes diez consejos para mejorar tu empleabilidad:

1. Especialízate: Un grado académico no asegura tu éxito profesional, sin embargo, al tenerlo percibes entre 25% y 40% más salario. Imagina que la especialización en alguna temática es el cuello de un embudo; por lo tanto, entre más conozcas sobre algo, podrás cotizarte de mejor manera.

2. Enfócate: Identifica tus metas profesionales y dales prioridad para que puedas dar el 100% en cada una de ellas. Si no tienen un objetivo en específico, difícilmente sabrás hacia dónde caminar para conseguirlo. Ten muy claro lo que buscas de una empresa y asegúrate que compagine lo más posible con tus planes e intereses.

3. Anticípate: Antes de concluir tus estudios o preparación, asegúrate de tener experiencia laboral. No sólo te dará otro tipo de conocimiento, sino que además tendrás una empresa que te avale. Recuerda que todo es experiencia y entre más pronto la adquieras te convertirás en un mejor competidor.

4. Resuelve: Los colaboradores indispensables para una empresa no son los que tienen mejor CV, sino los que saben cómo solucionar problemas. El mundo actual se mueve en la resolución de problemas, tema que muchas veces no nos enseñan cómo abordar. Sé inteligente y aprende a poner en práctica tu conocimiento, ofrece soluciones y ejecútalas.

5. Edúcate: No te conformes con tener un título universitario, mantente actualizado en las nuevas tendencias. Hablaba de la especialización, ahora bien, en este punto hago referencia a todo ese desarrollo fuera de tu campo profesional pero que lo complementa. Pon atención en desarrollarte integralmente, recuerda que hay que conocer un poco de todo.

6. Relaciónate: Muestra tus capacidades sociales para trabajar en equipo, generar confianza y armar alianzas entre colegas. No conocemos las vueltas que da la vida y sobretodo lo pequeño que puede llegar a ser el mundo, cuida bien las relaciones que haces dentro del trabajo y fuera del mismo.

7. Enfatízate: Haz notar aquello que mejor haces y te caracteriza de los demás. ¡Destaca tus talentos! Me queda claro que a veces ni siquiera nosotros los reconocemos, pero estoy seguro que hay algo que te hace diferente a los demás y que aporta de manera significativa a tu lugar de trabajo.

8. Sé proactivo: Los mejores resultados no se obtienen viendo qué pasa, levanta la mano y sal de tu zona de confort. Lo que se requiere en este mundo pasivo es personal activo, conviértete en el diferenciador entre no hacer y hacer; ten cuidado no significa que a todo tengas que decir que sí, pero si el balón está en tu chancha, realiza la mejor jugada y anota un gol.

9. Apunta alto: Donde tus ojos vean es a donde te llevarán. Cree en lo que estás haciendo y fija claramente tus metas. Si te conformas con poco, te quedas con poco. ¿Quieres un mejor trabajo? Cree que mereces un mejor trabajo y prepárate para tenerlo.

10. Véndete: Aprende a vender, si sabes hacerlo, nunca faltará dinero en tu bolsillo. Véndete a ti y a tus competencias humanísticas con resultados tangibles. ¡Qué difícil es creer en nosotros! A veces dudamos tanto que no nos damos la oportunidad de dejarle ver al otro todo lo que tenemos para dar, quítate el miedo y demuestra de lo que estás hecho.

Atrévete a sobresalir entre los demás, pequeños cambios serán la diferencia para que las empresas se fijen en ti. Tu empleabilidad no mejorará de la noche a la mañana, requiere de esfuerzo, perseverancia y sobretodo pasión. ¡Brilla, tienes todo para hacerlo!