De acuerdo al portal de noticias vanitatis.elconfidencial.com
Dolce & Gabbana reinventa la noche con una colección lenceria muy sensual
Lenceria muy sensual Dolce & Gabbana han presentado su colección de moda para el otoño-invierno, que vienen rodeados de amigas de la marca. La colección que han dado a conocer llevaba por nombre Sensuale, vaticinando que nos íbamos a encontrar una mujer hiperfemenina, la que promulgan los diseñadores desde hace años, pero esta vez con un giro de tuerca.
Una de las primeras en llegar al desfile era la modelo y amiga de la marca Bianca Balti, que lucía un plumas denim con interiores con print de leopardo sobre un bra de pedrería, una prenda que está convirtiéndose en una de las favoritas de los diseñadores, como pudimos ver en el desfile de Moschino hace un par de días. A los pocos minutos llegaba la que se ha convertido en musa de la marca, Kim Kardashian, enfundada en un vestido rosa fresa de pedrería con un colgante en forma de cruz al cuello.
Sonaban las notas del ‘Intermezzo sinfonico’ de la ‘Cavalleria rusticana’ para cambiar a música electrónica en un desfile que ha seguido unos tempos marcados por el color. Han tocado cuatro tonos por este orden: negro, dorado, blanco y rojo. La primera modelo, con un vestido largo de tul transparente y top de encaje, hacía una declaración de intenciones de lo que íbamos a ver a continuación.
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Todas las versiones de lencería posible gritaban que la mujer debe mostrarse, sin sutilidades, y proponen la sensualidad a través de una arriesgada apuesta en la que la mujer pasa de la lencería al sastre, para ellos no hay puntos medios. Encajes, tules y todo tipo de versiones de dehabillés, sujetadores, corseterías mezcladas con pedrería, strass y satén. Han apostado por mujeres sin miedo a salir semidesnudas a la calle, mujeres muy seguras de sí mismas que bajo abrigos y trajes esconden las más livianas piezas.
La segunda parte del desfile ha empezado con un vestido de lamé dorado, ese que representa los códigos de color de la firma. También hemos visto alguna pieza que otra con brillo galáctico que revestían faldas lápiz compuestas por miles de piezas de strass que los diseñadores han combinado con encaje. Merece especial mención un plumas con aspecto de manta térmica con cuello de pelo.
También nos ha sorprendido que muchas de las prendas lucían una etiqueta muy visible con una cifra (creemos que era 1999). En cuanto a los cuellos y bras de metal, aportaban rigidez a los picardías; sandalias de tiras con mucho tacón demostraban que ya pasan del confort, mientras bolsos de mano también han olvidado a los oversize.
Americanas con cortes de finales de los 80 o principios de los 90, con maxihombros recuperando la sensualidad masculina de aquellas ‘Armas de mujer’. Las modelos curvis también han hecho acto de presencia, aunque no con más de cinco o seis looks. Mencionable una espectacular Ashley Graham que abría la serie del rojo, con looks que se vestían más que los anteriores, como si la parte más lencera la reservaran más para los tonos neutros. Uno de los últimos looks que ha desfilado de pedrería roja de una factura increíble era el mismo que lucía Kim en el front row.
Este febrero han cambiado las tornas y en la colección prêt-à-porter que han presentado hemos podido ver cómo recurrían a sus emblemas clásicos. El dúo de diseñadores sicilianos han convertido su estética mediterránea de ensueño en el emblema que sigue, una tras otra, todas sus colecciones.
Este año se cumplen 38 años desde que desfilaron por primera vez en la pasarela de Milán y esta pareja profesional que se unió para formar una consultoría de diseño hoy son unos de los diseñadores que homenajean mejor desde la pasarela el espíritu de Italia. Las claves de esta colección han pasado por sus recurrentes y sensuales vestidos y ropa masculina. Este año los italianos dieron un golpe de efecto cuando en septiembre los diseñadores Stefano Gabbana y Domenico Dolce recurrieron a la megainfluencer Kim Kardashian para codiseñar su colección más reciente.
Con ella llenaron sus tiendas de camisetas que han vendido a cientos de euros como un souvenir. Y es que desde que, a principios de la década de 1990, la estrella del pop Madonna los seleccionó como sus diseñadores de vestuario para su gira mundial ‘Girlie’ y usó uno de sus corsés con incrustaciones de joyas en el Festival de Cine de Cannes, los diseñadores no han dejado de estar entre los favoritos de las celebrities.
A lo largo de los años 90, el dúo fue famoso por sus prendas coloridas y abiertamente femeninas, que contrastaban con la ola de minimalismo que extendían valedores de ese concepto como Calvin Klein o Armani. Para campañas y desfiles de varias temporadas, la pareja ha elegido a hombres y mujeres comunes y corrientes, generalmente de su Italia natal. En junio de 2013, Dolce y Gabbana fueron acusados y condenados por evasión de impuestos; sin embargo, el dúo apeló con éxito para anular su condena y la Corte Suprema de Justicia de Italia los declaró inocentes en octubre de 2014.
“Siempre hemos sido honestos y estamos extremadamente orgullosos de este reconocimiento por parte del Tribunal de Justicia de Italia. Viva l’Italia», dijo la pareja en un comunicado en ese momento. A fines de 2018, el dúo fue criticado por los medios cuando la marca publicó una campaña de marketing en la que aparecía una modelo italiana comiendo comida italiana con palillos, en un gesto de apropiación cultural despectiva con la cultura china.
Pero polémicas aparte, algo que persigue a muchas marcas, recordemos a Balmain este año o a aquel John Galliano cuando era director creativo de Dior, eso se ha superado y siguen en la cresta de la ola.
