Coke Salvans, director de Brooks Running en los mercados del sur de Europa (España, Francia e Italia), reconoce que cuando se decretó el estado de alarma en España a raíz de la pandemia del Covid19, “pensamos que iba a producirse un ‘efecto dominó’ de resultados catastróficos para el mercado”.
Pese a aquellas pesimistas expectativas, los resultados registrados hasta ahora no parecen confirmar aquellos pronósticos. De hecho, según Salvans, “cuando se produjo el cierre de tiendas, la mayoría de nuestros clientes ya había vendido el grueso de nuestros pedidos”. Por otro lado, el máximo responsable para España Francia e Italia de Brooks Running reconoce que “las cancelaciones sufridas no han sido tan acusadas”.
Reacción rápida y sensible
La marca que, desde siempre ha mostrado ante el retail una actitud cuidadosa, evitando masificaciones y concentrando la distribución de sus productos principalmente en establecimientos especializados en running y, en menor medida, en comercios multideporte que, según precisa el directivo, “entienden nuestro producto y velan por su posicionamiento en el mercado”, ha vuelto a demostrar ser sensible a las necesidades de sus clientes detallistas. Así, poco después de decretarse el estado de alarma, ya avisó a sus minoristas que postergaba las entregas de sus productos para el próximo otoño (previstas inicialmente en el mes de mayo) hasta el mes de julio.
