Ley y orden en el mundo de la moda

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  • Estas demandas demuestran lo desordenado que es el vientre legal de la moda.

Según publica lofficiel.es Si bien el ámbito de la moda puede parecer demasiado glamuroso y pintoresco para tener problemas legales monótonos, su posición como una industria de miles de millones de dólares dentro de la economía global ciertamente requiere una parte justa de conflictos legales.

Algunos de los minoristas más grandes de la industria se han encontrado en situaciones legales comprometidas que, de una forma u otra, conducen a demandas no tan atractivas. Por lo general, estos conflictos surgen cuando las marcas de lujo descubren que sus diseños se replican por una fracción del precio en distribuidores accesibles.


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Muchos recuerdan cuando Guess evitó lo que podría haberse convertido en otra demanda por imitación por crear una casi réplica de la ultrapopular bolsa de la compra de Telfar, y decidió en su lugar retirar el diseño de las ventas por completo.

Las demandas son un dispositivo que se utiliza para mantener el lujo en cierta medida, al mismo tiempo que honran el arte y la artesanía que intervienen en la producción de una prenda de vestir singular. Sin embargo, este no es el único tipo de demanda que es común dentro del mundo de la moda. Se han producido importantes conflictos por tenencia mayoritaria, malos tratos y condiciones de trabajo inadecuadas.

Gucci v. Forever 21John Galliano v. Dior y Former Intern v. The Hearst Group son solo algunas demandas notables que se abrieron paso en la esfera pública en los últimos años, pero los conflictos legales son más comunes de lo que piensas. La batalla en curso de Chanel contra los revendedores ha preservado la posición de la marca en la cima del tótem de la moda al mantener sus productos exclusivos y de élite.

Esto demuestra cuán esenciales son las demandas dentro de esta industria bulliciosa y en constante evolución, independientemente de si tenían la intención de combatir la apropiación o mantener la agencia simbólica. Echa un vistazo a las demandas más memorables de la moda, confía en nosotros, están lejos de ser fabulosas.

Adidas contra Thom Browne

El 3 de enero de 2023, Adidas y Thom Browne acudieron a los tribunales en relación con la batalla legal en curso que comenzó después de que Adidas presentara una infracción de marca registrada y una demanda por dilución contra Thom Browne en la que afirmaba que la etiqueta «vende ropa y calzado de estilo deportivo con dos, tres o cuatro rayas paralelas de una manera que es confusamente similar a la marca de tres rayas [de Adidas]”.

Adidas busca un poco más de $867,000 en daños y $7 millones en ganancias adicionales. En refutación a las afirmaciones de Adidas , la marca de alta costura expresa que la marca de ropa deportiva no impulsó ninguna acción en 2008 después de que Browne revelara sus cuatro rayas distintivas, por lo que no es aceptable esperar tanto para afirmar que hay un problema.

La casa de diseño también declaró que Thom Browne y Adidas ni siquiera son competidores directos, lo que significa que los consumidores no deben confundirse con las rayas, ya que las marcas atienden a dos clientes diferentes. La batalla legal aún continúa mientras Browne y Rodrigo Bazán, el director ejecutivo de Thom Browne, se preparan para testificar.

Dior contra Valentino

En julio de 2022, Dior demandó a Valentino por organizar un desfile de moda que bloqueó la boutique de la casa en Roma. Dior alegó que Valentino impidió que los posibles clientes ingresaran a la boutique de Dior bloqueando las barreras y negándose a dejarlos salir del área de la Plaza de España. En consecuencia, la boutique estaba vacía y no podía operar el viernes. La casa exige 100.000 euros en un plazo de 15 días a Valentino y tomará las «medidas necesarias» si el diseñador no paga.

Hermes contra LVMH

La relación de Hermès con LVMH (Moët Hennessy Louis Vuitton) siempre ha sido tensa. Su identidad como marca francesa familiar entra en conflicto con la posición de LVMH como un importante conglomerado internacional. En 2010, LVMH poseía el 14,2 por ciento de Hermès y afirmó que no tenía la intención de obtener más control sobre la marca. Sin embargo, en cuestión de años, LVMH anunció que sus participaciones aumentaron al 22,3 por ciento.

Esta noticia llegó al entonces CEO de Hermès, Patrick Thomas, solo unas horas antes de que llegara a los principales medios de comunicación de todo el mundo. Este movimiento inesperado provocó una serie de demandas hasta que LVMH acordó la desinversión en 2014.

Hells Angels contra Alexander McQueen

En 2010, el legendario club de motociclistas, Hells Angels, demandó al diseñador de lujo Alexander McQueen sobre la base de que la casa de moda británica estaba haciendo un mal uso de su símbolo de cabezas de muerte aladas de marca registrada.

Los Hells Angels, que operan una corporación en pleno funcionamiento, citaron que un anillo de cuatro dedos y un bolso de mano de mujer tenían el motivo de la muerte alada característico del grupo. McQueen resolvió la demanda al aceptar destruir la mercancía que mostraba la firma.

John Galliano contra Dior

En 2011, John Galliano fue destituido como jefe de Dior a raíz de su uso de difamaciones antisemitas problemáticas. Después de que su arrebato decepcionante fuera capturado por la cámara, la posición de Galliano como una figura notable en el mundo de la moda se vio afectada.

Sin embargo, solo unos meses después, presentó una demanda contra su antiguo empleador por aproximadamente $18,8 millones. Galliano alegó que fue despedido injustamente, pero el tribunal finalmente rechazó su reclamo.

Yves Saint Laurent contra Christian Louboutin

En 2012, Christian Louboutin inició una disputa legal con Yves Saint Laurent luego de que la marca de lujo lanzara un zapato de tacón alto que incluía una suela completamente roja. Después de una batalla de 18 meses en los tribunales, ambas marcas finalmente se salieron con la suya.

El tribunal concluyó que Louboutin tenía derecho a la protección de la marca registrada sobre sus suelas rojas y que otras empresas pueden seguir vendiendo zapatos con suela roja, siempre que todo el zapato sea rojo. Saint Laurent pudo mantener este zapato como parte de su colección debido a que era completamente rojo.

Gucci contra Guess

Gucci y Guess se vieron envueltos en una batalla legal de casi una década que finalmente terminó en un acuerdo en 2018. El litigio, que se centró en las afirmaciones de Gucci de que el minorista usó un logotipo y un patrón de diamantes que infringían su marca registrada, abarcó varios países, incluidos Italia, Francia, Australia y China.

La primera acción legal se tomó en 2009, cuando Gucci acusó a Guess de falsificación, competencia desleal e infracción de marca registrada.

Gucci llevó a Guess por primera vez a un tribunal federal de Nueva York en 2009, acusando a la marca de falsificación, competencia desleal e infracción de marca registrada, con base en un par de zapatillas de marca. En 2012, la marca de lujo italiana recibió 4,7 millones de dólares por daños y perjuicios.

En sus procedimientos internacionales, Milán y París se pusieron del lado de Guess, mientras que China y Australia fallaron a favor de Gucci. No se discutieron los términos del acuerdo de 2018, pero ambas marcas hicieron una declaración conjunta que decía: «El acuerdo es un paso importante para que ambas compañías reconozcan la importancia de proteger sus respectivas carteras de propiedades y la creatividad del diseño».

Valentino y Amazon contra vendedores falsificados

En junio de 2020, Maison Valentino se asoció con Amazon para presentar una demanda conjunta contra un vendedor del mercado de Amazon que producía y vendía innumerables versiones falsificadas de los famosos zapatos Garavani Rockstud de Valentino .

A pesar de las estrictas políticas de Amazon contra las falsificaciones, la potencia del comercio electrónico ha proporcionado una plataforma para que los principales distribuidores de engaños lleguen a los compradores internacionales desde su creación.

Con Valentino, Amazon alegó que Kaitlyn Pan Group cometió una infracción «a sabiendas y deliberadamente» del diseño patentado de Valentino y, como resultado, el vendedor fue eliminado de Amazon por completo.

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