Christian Dior diseña su mundo en miniatura para Harrods

Dior
  • Una experiencia inmersiva a través de la vida de Christian Dior cobró vida en la Navidad más exquisita de Harrods, la meca del lujo en Londres

Según publica lavanguardia.com La magia de la Navidad cobró vida dentro de los legendarios almacenes Harrods bajo el nombre de The Fabulous World of Dior, un evento histórico y excepcional que consiguió fusionar el encanto del espíritu inglés con el lujo francés y el refinamiento del art de vivre.

Ha sido la primera vez en la trayectoria del centro comercial más famoso de Londres que una marca de lujo tenía a su disposición la boutique entera; prueba del vínculo poderoso e infranqueable que une a Christian Dior con Harrods desde 1953 a través de colaboraciones exclusivas.


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La fachada de Harrods se llena con un juego de luces reinterpretadas por el artista Pietro Ruffo para la colección Crucero 2023

La fachada de Harrods se llena con un juego de luces reinterpretadas por el artista Pietro Ruffo para la colección Crucero 2023. Alex Upton

Durante la campaña de Navidad, la fachada del edificio de Brompton Road se vistió de lujo con una instalación monumental de un juego de luces inspirado en las referencias fundamentales de Dior reinterpretadas por el artista Pietro Ruffo para la colección Crucero 2023 de la marca. La rosa de los vientos, las estrellas de la suerte y las flores centelleantes guiaban a los visitantes más curiosos a lo largo de las 44 ventanas del exterior de los almacenes hasta su interior, donde aguardaba una experiencia inmersiva a través de la vida de Christian Dior y la historia de la casa de la moda de lujo.

Una impresión de la maqueta del escaparate de lujo de Harrods

Una impresión de la maqueta del exterior de los almacenes Harrods. JAMES ROBJANT

Dos experiencias únicas en un mismo espacio: una oda al apego de Christian Dior a la celebración de la Navidad y el arte de cuidar a la familia, y una exposición que jugaba con las proporciones para encantar los sentidos y fascinar a partes iguales. Todo esto amenizado por el Café Dior, un oasis gourmet especialmente concebido para la ocasión. En este, los emblemáticos bolsos Book Tote y Saddle Bag se convertían en modelos de pan de jengibre dispuestos a ser devorados.

La exposición inmersiva presentaba un pueblo en tamaño micro ejecutado con edificios y jardines simbólicos de Dior. Concebida como una casa de jengibre, las pequeñas maquetas invitaban a adentrarse en los rincones más secretos de 30 Montaigne -el centro neurálgico de la casa francesa-, Granville -la casa donde vivía la familia Dior- o el castillo de la Colle Noire -la propiedad adquirida en 1951 que se convirtió en su paraíso de flores-, para así descubrir el virtuosismo de sus creaciones entre bastidores.

La maqueta

Los clientes de Harrods pudieron visitar un pueblo en tamaño mini construido con edificios y jardines simbólicos de Dior. ADRIEN DIRAND

Los clientes de Harrods pudieron visitar un pueblo en tamaño mini construido con edificios y jardines simbólicos de Dior

Los clientes de Harrods pudieron visitar un pueblo en tamaño mini construido con edificios y jardines simbólicos de Dior. ADRIEN DIRAND

Dentro, el Lady Dior revelaba sus líneas arquitectónicas como un fascinante ballet o el Dior Book Tote, el icónico bolso bordado de la casa francesa, expresaba su gran singularidad a través de detalles de su diseño. Un universo de fantasía, enteramente elaborado por galletas decoradas con dibujos, una nueva expresión de la audacia y el arte del detalle que caracteriza a la casa de lujo.

Un viaje por el universo de Dior que continuaba con una segunda ventana emergente, una tienda parar encontrar un regalo muy especial. Una selección de prendas y accesorios que iban desde camisetas estampadas que evocan a la primera colección de Maria Grazia Chiuri para Dior –cómo olvidar el famoso emblema feminista We should all be feminists– hasta artículos para el hogar que celebran el arte de vivir arraigado de la Maison francesa.

Uno de los vestidos hechos miniatura que se podían apreciar en la experiencia inmersiva que Dior preparó en los almacenes Harrods

Uno de los vestidos hechos miniatura que se podían apreciar en la experiencia inmersiva que Dior preparó en los almacenes Harrods. SOPHIE CARRE

 

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