Según publica gq.com.mx Bienvenidos al Gentlemen’s Club de Chopard. En el Festival de Cannes 2023, la casa suiza se transformó en un auténtico club inglés en la azotea del Hotel Martinez. Fue un momento ajeno al frenesí de Cannes que celebró las colecciones de relojes masculinos de Chopard, así como la artesanía y la experiencia de la destacada casa fundada en 1860.
Desde Paul Dano hasta Mads Mikkelsen, pasando por Ruben Ostlund, Shaïn Boumédine o Emmanuelle Béart, los invitados tuvieron la oportunidad de disfrutar de la música del famoso saxofonista Jimmy Sax y los actos de ilusionismo de David Jarre, mientras degustaban cócteles Campari y la cocina firmada por Cipriani Venice, todo ello gracias a la invitación de los copresidentes de Chopard, Caroline y Karl-Friedrich Scheufele.
La velada Gentlemen’s Evening estuvo marcada por un ambiente festivo y destacó las elegantes piezas de relojería masculina de Chopard que llevaban la mayoría de los invitados, incluyendo a los embajadores de la marca: Mikkelsen y Boumédine, quien saltó a la fama en 2017 tras aparecer en la película Mektoub My Love del director Abdellatif Kechiche y anoche regresó a Cannes.
“Es una gran oportunidad trabajar con una casa como Chopard que representa la elegancia en su máxima expresión. Estoy contento de volver a Cannes, aprovecharé para ver algunas películas”, confesó el actor, con quien GQ tuvo una entrevista al día siguiente.
Para Boumédine, cuyo estilo define como “entre streetwear y elegante”, los relojes del joyero suizo cuentan con una “elegancia” universal indiscutible. El actor, quien usa el modelo Chrono One Flyback de Chopard, aprecia especialmente este reloj por su “correa de cuero” y su aspecto “ligero y luminoso”.
“Cannes se ha vuelto casi inseparable de nosotros”, subrayó Karl-Friedrich Scheufele, recordando la estrecha relación que la relojera mantiene con el festival de cine más importante del mundo desde 1998.
El CEO de Chopard asistió este año para presentar dos nuevos modelos de relojes, que describió como “los más emblemáticos y elaborados que Chopard ha creado hasta ahora”. Para este experto en relojería, el Festival de Cannes no es solo una “vitrina para la alta joyería”, sino también el momento perfecto para resaltar la “cultura relojera de Chopard transmitida de generación en generación”.
Los nuevos modelos de Chopard
Además de dar a conocer a una camada de prometedores actores y actrices mediante el galardón Trophée Chopard, la casa suiza aprovechó la ocasión tan especial para enorgullecerse de su artesanía y savoir-faire de alto nivel.
Lo hizo mediante la revelación del nuevo modelo L.U.C Full Strike Sapphire, una auténtica proeza de innovación, ya que cuenta con un “mecanismo de repetición de minutos”. Este reloj también tiene la capacidad de producir un sonido “como si saliera de un altavoz”, a diferencia de las cajas tradicionales.
“Los dos pequeños martillos de acero golpean y transmiten un sonido fuera de la caja al que hemos llamado ‘cristalino’ porque transporta el sonido de adentro hacia afuera”, explicó Karl-Friedrich Scheufele.
El otro modelo presentado fue el L.U.C Flying T Twin, que cuenta con un tourbillon volador (como sugiere su nombre) a las 6 en punto y está rodeado de cientos de zafiros talla baguette en un degradado de azul profundo, engastados en una caja de oro ético de 18 quilates.
Con su Alpan Eagle de acero en la muñeca, el director general de Chopard recordó que un solo reloj Chopard requiere “mil horas de trabajo” y todo “un equipo de personas colaborando en conjunto”. Suficiente para una gran celebración en Cannes.
