Por dentro, tiene un diseño bastante minimalista, mientras que debajo del capó contará con un motor 1.5 i-VTEC de 126 CV y 15,5 kgm de torque, asociado a una transmisión automática de tipo CVT de siete velocidades.
En las variantes más equipadas, el propulsor será de misma cilindrada, pero se encontrará turboalimentado. La diferencia estará en la potencia, ya que rondará los 177 CV y el torque será de 24,5 kgm. En ambos casos, la transmisión es automática de variador continuo (tipo CVT) con simulación de siete velocidades y levas al volante (salvo la configuración de entrada).
Las versiones más económicas (con motor aspirado) son las EX y EXL, mientras que las más equipadas son la Advance y la Touring.
Obviamente habrá que ver si mantendrá estas configuraciones en la Argentina, ya que la presentación regional se llevó a cabo en Brasil, lugar donde se produce.
Entre los detalles a tener en cuenta es el paquete de seguridad Honda Sensing, que se lo identifica por ofrecer control de velocidad crucero adaptativo, sistema de mantenimiento de carril, control automático de luces, sistema post colisión, entre otros.
A su vez, cuenta con dirección adaptativa, seis airbags, control de estabilidad y tracción, asistente de arranque en pendientes, por mencionar algunos elementos destacados.
Además, cierre de baúl con sensor de proximidad, arranque de motor por botón, asiento del conductor con ajuste eléctrico, pantalla de ocho pulgadas, climatizador automático bi-zona, sensores de estacionamiento, freno de estacionamiento electrónico, instrumental con display de 7 o 4,2 pulgadas (depende versión), alerta de presión de neumáticos y sensor de lluvia.
Todavía no hay datos oficiales acerca de su llegada a la Argentina, pero debería desembarcar en nuestro país en esta segunda mitad de año.
