Según publica el portal periodismodelmotor.com
El Paseo de Coches del Retiro lo transitaban 12.000 coches al día. El Parque del Retiro de Madrid es una atracción para autóctonos y foráneos de la capital, un lugar repleto de naturaleza en mitad del gris hormigón de la urbe. Sin embargo, el primer parque de Madrid no siempre ha estado libre de coches, ya que hubo un tiempo en el que el Paseo de Coches del Retiro lo transitaban hasta 12.000 coches al día. Esto ocurrió hasta su prohibición en la década de 1980.
Considerado como la calle principal del parque, el Paseo de Coches del Retiro se inauguró en la Primera República (1873-1874). Fue patrocinado por el Duque de Fernán Núñez, un aristócrata que deseaba pasear a caballo por el parque y aportó la mitad del dinero que costó abrir el paseo, 55.000 pesetas. Por ese motivo, este paseo lleva su nombre, aunque el duque hizo negocio cobrando 2,5 pesetas al día por carruaje o caballo, lo que le reportó grandes ganancias.
El Paseo de Coches del Retiro lo transitaban 12.000 coches al día
En esa época, por el Parque del Retiro circulaban coches de caballos únicamente hasta la llegada de los vehículos a motor. Fueron habituales en el paisaje del parque durante décadas. Sin embargo, en la década de 1970 se decide que el Retiro sea más un parque que un lugar de tránsito para vehículos, por lo que se instalaron radares que medían la velocidad y cazaban a los automovilistas que superaban los 40 km/h circulando por el paseo.
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No se tardaría mucho en expulsar por completo a los coches del Retiro. Sería en los ’80 cuando llegaría la total prohibición, una polémica medida que ponía fin un siglo de tradición en la que miles de ciudadanos y turistas habían conocido el parque como un lugar por el que transitaban hasta 12.000 coches al día.
En la actualidad, los únicos vehículos que circulan por el Parque del Retiro son bicicletas y patinetes, así como algún coche de Policía y de mantenimiento de las instalaciones. Y en el futuro, por las calles que flanquean el parque tan solo podrán circular coches eléctricos a medida que avanzan los planes de la ciudad para expulsar a los vehículos con motor de combustión interna de Madrid.
