“La situación para nosotros es crítica, casi el 98% de las bodegas estamos en subsistencia», señaló el presidente de la ABP.
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“Empecé con una bodega pequeñita y ahora es un minimarket en Santa Anita. Ya tengo nueve años en el negocio, y el trato a mis clientes es diferente porque converso con ellos”, cuenta Carla Campos, vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Bodegueras del Perú (Agremub).
Así como la representante del gremio, son muchos los negocios, sobre todo en Lima, que cambian de un formato a otro más moderno, como minimarkets o las tiendas por conveniencia. ¿Esto llevaría a su desaparición del mercado?
Las bodegas y su conversión a minimarkets
Primero es conocer en qué situación se encuentran. La Asociación de Bodegueros del Perú (ABP) y la Asociación de Mujeres Bodegueras del Perú (Agremub) coinciden que estos pequeños negocios atraviesan por una crisis debido a varios factores entre los que figuran: la pandemia del COVID-19, las protestas sociales y el alza de precios.
“La situación para nosotros es crítica, casi el 98% de las bodegas estamos en subsistencia. Nos afecta en el proceso de la compra. Es decir, compras un producto a un S/ 1,80 para venderlo a S/ 2”, señaló Andrés Choy, presidente de la ABP a gestion.pe.
Choy -quien lidera este gremio conformado por 22,000 asociados (95% de Lima y 5% el Callao)– añadió que otra problemática que les genera pérdidas es la delincuencia a través de robos y extorsiones a propietarios de bodegas.
“En diciembre nos quedamos con mucho stock y tenemos que tratar de venderlo. Lo que nos ha ayudado bastante son las bebidas [aguas, energizantes y cervezas]. Ahora ya hemos recuperado el 25% de caída por la venta de productos, pero todavía los precios siguen incrementándose sobre todo los productos de aves , huevos y pollo”, comentó el presidente de Asociación de Bodegueros del Perú.
Por su parte, Carla Campos, vicepresidenta de la Agremub, indicó que cerca de un 30% se reporta en pérdidas y que el panorama responde a la inflación. Sin embargo, contó que la campaña por el Día de la Madre las ayudó en obtener un 20% más de ganancias.
Según, la representante de la Asociación de Mujeres Bodegueras del Perú conformada por 2,000 socias en todo el país, las propietarias de estos negocios se han visto también afectadas en las regiones de Tumbes y Piura por las lluvias intensas debido a que sus espacios fueron inundados.
Demanda de alquiler de locales comerciales
Respecto al alquiler de locales comerciales, el gerente de Investigación de Colliers International, Sandro Vidal, mencionó que hay una tendencia de incrementar la variedad de la oferta inclusive a niveles de bodegas que son espacios con dimensiones entre 25 m2 a 100 m2.
“Por ejemplo, si antes en bodegas observábamos productos de primera necesidad ahora se está agregando también productos de limpieza, cosméticos, accesorios tecnológicos, comidas y bebidas rápidas (sánguches y refrescos)”, señaló a gestion.pe.
No obstante, comentó que lo que viene marcando tendencia es la búsqueda de locales comerciales para minimarkets y tiendas por conveniencia. “Locales de más de 100 m2 ya podemos hablar de tiendas por conveniencia donde la oferta es más variada y el tema de la ubicación es más apreciada. Este tipo de locales se ubican en zonas de alto nivel de residencialidad, y donde hay un flujo peatonal importante”, dijo.
Vidal comentó que se observa mayor interés de alquiler de locales para minimarkets en los distritos que se ubican en Lima Moderna: Jesús María, Lince, Pueblo Libre, Surco y algunas partes de Surquillo.
En tanto, aunque la tendencia no muestra un alza marcada, sí existe interés de alquiler de locales comerciales para este tipo de negocio en San Juan de Lurigancho, San Juan de Miraflores y el Callao. “Ahí las bodegas de barrio todavía se mantienen vigentes y en una gran cantidad”, refirió.
¿Las bodegas desaparecerán?
Los representantes de los gremios de bodegueros, Andrés Choy y Carla Campos coincidieron en que las bodegas no desaparecerán al señalar que este tipo de negocios aún siguen vigentes en zonas o vecindarios de ingresos medios o en barrios de bajos medios.
“Que desaparezcan es complicado. Por ejemplo, hay bodegas en un cerro y es difícil que se vuelvan minimarkets porque no tiene la infraestructura y el acceso. Cuando uno va a una tienda por conveniencia el trato es distinto: vas pides, pagas y listo”, dijo Campos.
Por su parte, Choy mencionó que en la actualidad lo que va surgiendo es un modelo híbrido “bodega-minimarket”. Según explicó, en este espacio el cliente elige los productos, pero finalmente aún queda vigente la interacción entre el dueño o propietario del establecimiento al momento de la atención.
Detalló que en la Asociación de Bodegueros del Perú existen grupos divididos en: bodega-minimarket, bodega atención mostrador y bodeguitas ventanas (ubicadas en cerros) y ahora se han sumado grupo de dueños de puestos de abarrotes ubicados en mercados.
“Calculamos que del total de los socios del gremio, un 30% los son el modelo bodega-minimarket. La mayoría son de Lima. En Lima Norte tenemos bastantes y Lima Centro. Estamos hablando de mas o menos 4,000 bodegas de este tipo híbrido”, comentó.
Andrés Choy dijo que el 75% del consumo masivo en Perú figura en el canal tradicional (bodegas) y 25% canal moderno (tiendas por conveniencia). Una situación diferente se reporta en Chile y Argentina.
En tanto, Sandro Vidal de Colliers International, comentó que a que a la fecha las bodegas continúan incrementando su oferta, mientras que en paralelo también sube la demanda.
“No necesariamente las bodegas van a desaparecer se van a mantener, pero ahora las están llamando minimarkets”, sostuvo.
Adaptación, modernización y tecnología
“Las bodegas tratan de adaptarse, pero no desaparecerán en un futuro”, insistió el presidente de la ABP. Choy explicó que ellos desarrollan la denominada “evangelización” a los dueños de estos negocios para que adopten a la digitalización como parte de sus acciones de mejora para el servicio al cliente.
“Hemos motivado el tema del uso del WhatsApp. Hay personas mayores, y estos son reacias al uso de tecnología. Las personas de 40 años para arriba están en proceso de adecuación. Tenemos aún una mayor porción de bodegueros que son mayores, pero jóvenes sí trabajan con la tecnología. También usamos redes sociales e inclusive TikTok”, refirió.
Por su parte, la presidenta de la Agremub informó que vienen capacitando a las agremiadas en la digitalización. “Hoy en día tenemos muchas billeteras móviles, la gente paga con Yape y Plin. Queremos que un futuro sean negocios con un programa de cobro, que tenga un punto de venta que sea diferente a otros negocios. Esperamos que en un futuro todos sean así”, remarcó.
“Con la digitalización puedes tener tu mercadería controlada. Sabes cuánto ganas o qué producto no tiene mucha rotación. Quién no quisiera aspirar a un market o minimarket. Tener otras opciones para que siempre marques la diferencia por si vas a Mass, Oxxo u Tambo”, finalizó.
