Nuevos dueños de Claro Panamá prometen mejores servicios, precios y dividendos

El acuerdo de intención de compra de las operaciones de Claro que anunció Cable & Wireless Panamá (subsidiaria de Liberty Latin América LTD) este miércoles, 15 de septiembre, está amparado en la Ley 36 del 5 de junio de 2018 que permite y regula la concentración económica entre dos concesionarios del servicio de telecomunicación móvil, y que está vigente actualmente.

La concretización de la compra ahora está en manos de la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco), que deberá hacer el análisis para que se pueda hacer efectiva la transacción.


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Así lo explicó en entrevista con La Estrella de Panamá el presidente ejecutivo de Cable & Wireless, Julio Spiegel, quien destacó que la Ley 36 del 5 de junio de 2018 surgió con la finalidad de que en Panamá, un país de 4,2 millones de habitantes, se pudiera pasar de 4 a 3 operadores de telecomunicaciones, porque la ley no lo permitía.

Indicó que la iniciativa se propuso con la intención de que el país pudiera adecuarse a la tendencia mundial, porque “no podemos diluir el espectro radioeléctrico, que es el recurso escaso que hay para poder brindar las telecomunicaciones móviles, y por lo tanto es regulada”.

Añadió que en Estados Unidos, por ejemplo, acaban de pasar de 4 a 3, y allá tienen 300 millones de habitantes. “La Ley 36 del 5 de julio se aprueba y permite que pudiéramos pasar de 4 reguladores a 3 sin describir quién y cómo se haría, ni quién tendría que comprarle a quién”, dijo Spiegel.

Precisó que tras ser aprobada, la ley se pasó a la Autoridad de los Servicios Públicos (Asep) para que la reglamentara; y en esta reglamentación se indican dos cosas: que cuando estas compañías se unan, no superen un límite máximo de espectro que es de 130 megahertz, y en este caso llegamos (C&W y Claro) a 125 megahertz. Y lo segundo es que la transacción debe pasar por un proceso de análisis por parte de la Acodeco.

Agregó que por lo pronto las dos empresas van a seguir operando de la misma forma en que lo han venido haciendo. “No hay ningún cambio ahí, hasta que se apruebe la transacción, que es el momento en el que se cierra la compra”, apuntó.

El gigante mexicano de las telecomunicaciones América Móvil, propiedad del magnate Carlos Slim, informó ayer que vendió el 100% de la acciones de su subsidiaria Claro Panamá, a C&W Panamá, subsidiaria de Liberty Latin América.

Explicó que la transacción excluye las torres de telecomunicaciones que son propiedad indirecta de AMX (América Móvil) en Panamá, y la marca Claro. La venta se acordó en $200 millones ajustado por deuda neta a la fecha de cierre de la transacción. El cierre de la transacción está sujeto a las condiciones usuales para este tipo de operaciones, incluidas las autorizaciones regulatorias.

Spiegel recordó que el 49% de las acciones de C&W Panamá (subsidiaria de Liberty Latin América) son del Estado, 2% de los trabajadores y el 49% es de Liberty Latin América (operador).“En una junta de accionistas se firmó el acuerdo para la adquisición de Claro Panamá con todos los productos y servicios que ellos ofrecen, lo cual se anunció ayer. Unánimemente se aprobó”, dijo Spiegel.

Precisó que para la compra, dependiendo de la fecha en que se termine, entre $100 o $125 millones van a salir de los flujos de la compañía y el resto a través de financiamiento, por lo que van a salir inmediatamente a la banca local a buscar quién les pueda prestar. “Este es otro de los beneficios de esta transacción, que además, utilizaría los servicios financieros de este país”, acotó Spiegel.

Spiegel estima que la transacción podría concretarse en un periodo de entre seis y nueve meses. “Vamos a proveer toda la información a Acodeco y luego de que ellos pasen por sus procesos de análisis, y si lo aprueban, entonces procedemos a hacer efectiva la transacción”, expresó.¿Qué representa para el país la adquisición de las operaciones de Claro?Al respecto, Spiegel dijo que C&W Panamá es una empresa panameña con una composición accionaria del Estado, los trabajadores y un operador internacional de clase mundial que es Liberty Latinoamérica.

Recordó que C&W nació en el año 1997, producto de la privatización del Instituto Nacional de Telecomunicaciones (Intel), que era una empresa estatal.

El método que se utilizó fue el de una privatización mixta, con lo cual Panamá retuvo el 49% de las acciones y como en ese momento había trabajadores en el Intel se acordó incluirlos con el 2% de las acciones de la compañía.

En 24 años, y hasta finales de 2021, la compañía ha contribuido a la economía, con alrededor de $9 mil millones, de los cuales solo en dividendos al Estado y a los trabajadores se superan los mil millones de dólares.

Spiegel aseguró que “consolidar estas dos empresas para seguir el estándar mundial nos va a permitir ofrecer mejores servicios a precios más competitivos, con mejores velocidades, con mayor cobertura”.

Pero al mismo tiempo, “poderle brindar mejores dividendos, ahora no a una empresa que es extrajera, sino que estos dividendos van a terminar de vuelta, el 51% de los dividendos quedan en Panamá, o sea que es bueno para Panamá, bueno para la compañía y muy bueno para todos nuestros clientes”, agregó.

Respecto a la participación del país en el ámbito de las telecomunicaciones, dijo que “C&W Panamá, S.A. es una empresa panameña y la participación es a nivel de junta directiva. La administración de la empresa está con el socio técnico que en este caso es Liberty Latinoamérica”

Marca Claro y los clientes, ¿cómo quedarán?

Spiegel informó que una vez se apruebe la transacción y se empiece la transición, se estará haciendo la integración de todos los productos y servicios de Claro dentro del portafolio de C&W a través de la marca + Móvil. La marca Claro eventualmente estará “desapareciendo” del mercado.

“La otra transacción que se hizo fue la de Tigo, y hubo un periodo en el que operaron con la marca anterior y después se hizo un cambio a la marca actual”, detalló el presidente ejecutivo de C&W.