Cristian Godoy Carter – Director, Consultor, Gerente General, Gerente Comercial
Según lo comprometido el 12 de noviembre, aprovecharemos de abordar en el PASEO DEL PERRO, los TEMORES que más nos agobian día a día. A modo de recuerdo, los volvemos a mencionar;
El temor a la POBREZA; ya visto en PASEO DEL PERRO del 12 de noviembre
El temor a la CRÍTICA; lo veremos hoy 21 de noviembre
El temor a la ENFERMEDAD
El temor a la PÉRDIDA DEL AMOR
El temor a la VEJEZ
El temor a la MUERTE
El TEMOR A LA CRÍTICA, sin duda es la muestra más clara de nuestro COMPLEJO DE INFERIORIDAD, el cual creemos que no existe, sobre todo si nos sentimos “muy seguros”, pero……siempre se esconde por ahí, y es una SOMBRA que nos acompaña (muy corta cuando el sol brilla sobre nosotros, pero muy larga si el sol se está escondiendo o recién saliendo). Incluso, podríamos decir, que generalmente detrás de todo sentimiento de SUPERIORIDAD, se esconde este complejo, disfrazado de logros imaginarios, uso de “buenas palabras” para impresionar a los demás (incluso sin saber su verdadero significado), imitar a los demás en sus formas de vestir, hablar y comportarse, para tratar de lograr aceptación. En fin, esa costumbre de buscar la aprobación por medio de palabras y acciones para ocultar el propio sentimiento de inferioridad.
Y todos debemos de alguna u otra forma, sentirnos identificados por este temor.
Incluso el mercado aprovecha esta situación, en ciertas industrias, por ejemplo, la industria de la moda cambia sus estilos por temporada, o en ZARA cada 2 semanas. ¿Por qué se cambian los estilos?; para estar en lo último, y no “sentirse fuera”. Lo mismo en la industria automotriz, y muchas otras.
Recuerdo a muy estimada colega Erica Pavez, que entrando a trabajar con nosotros como Gerenta de Adm. y Finanzas en una Textil, entonces yo miro su tenida (era el Gerente Comercial y de Exportaciones), y reconociendo nuestras telas, le comento con cierto sarcasmo “temporada anterior Erica”…..Sin duda otros tiempos, y yo muy desubicado, pero es para mostrar el punto. Nos subimos al carro de “la aceptación” por temas superficiales, hasta en los más pequeños e insignificantes aspectos de la vida. Pero qué pasa con nosotros en temas tan profundos, como lo que podemos generar en nuestros hijos, afectando quizás sus más relaciones humanas futuras.
El temor a las críticas despoja al ser humano de su INICIATIVA, destruye su capacidad de imaginación, limita su individualidad, sustrae su confianza en sí mismo y le hace daño de cien maneras distintas.
Nosotros como padres, podemos hacer daños que serán muy difíciles de reparar, cuando criticamos a nuestros hijos, o los comparamos constantemente con sus hermanos, o primos; incluso podríamos hasta decretarles su destino. ¿Cuántos casos de abusadores, no son por ser hijos abusados?. Por ejemplo, una madre que a su hijo hiperactivo le dice constantemente algo como “si sigues así terminarás en la cárcel algún día”, lo más probable es que al final su hijo termine ahí, o en un reformatorio. Ni hablar de aquellos que los “tontean” todo el rato. O incluso, esa MALA COSTUMBRE de tenerlos en “terciopelo”, y que no pasen malos ratos….esos los genera inseguros y dependientes. Todos tenemos algo de eso, y para evitar que cualquier padre o madre cree complejos de inferioridad en la mente de un niño por medio de críticas innecesarias, debiera existir una ESCUELA DE
PADRES, de todo colegio para evitar al máximo este tipo de errores en la formación.
Veamos, según Napoleón Hill, cuáles son los SÍNTOMAS DEL TEMOR A LAS CRÍTICAS a los cuales todos nos vemos enfrentados, y a los cuales nuestros hijos también lo podrían estar;
TIMIDEZ; Generalmente expresada por medio de nerviosismo, timidez en las conversaciones y en los encuentros con personas desconocidas, movimientos torpes de las manos y los pies y una mirada inquieta.
FALTA DE POSTURA; Expresada mediante una falta de control de la voz, nerviosismo en presencia de los demás, mala postura del cuerpo y mala memoria.
PERSONALIDAD; Falta de firmeza en las decisiones, de encanto personal y de capacidad de expresar las opiniones de forma terminante. Hábito de dejar a un lado los asuntos en lugar de enfrentarse a ellos directamente. Estar de acuerdo con los demás sin revisar detenidamente sus opiniones.
EXTRAVAGANCIA; Hábito de intentar “aparentar”, gastando más de lo que le permiten tus ingresos.
FALTA DE INICIATIVA; Fracaso a la hora de aprovechar oportunidades para progresar, temor a expresar opiniones, falta de confianza en las propias ideas, dar respuestas evasivas a preguntas de un superior, vacilación en la manera de comportarse y de hablar y engañarse con palabras y acciones.
FALTA DE AMBICIÓN; Pereza mental y física, falta de carácter firme, lentitud en la toma de decisiones, dejarse influir fácilmente por los demás, hábito de criticar a los demás a sus espaldas y de halagarlos en su presencia, costumbre de aceptar las derrotas sin protestar, de abandonar una tarea cuando los demás se oponen, de sospechar de los demás sin pruebas, falta de tacto en la conducta y el habla, e incapacidad de aceptar la propia culpa por los errores cometidos.
Por ejemplo, hoy en día las empresas exitosas, que comprenden la naturaleza humana, sacan lo mejor de las personas no mediante críticas, sino por medio de sugerencias constructivas. Nosotros como padres podemos lograr los mismos resultados con nuestros hijos, ya que las críticas sólo sembrarán MIEDO o resentimiento en el corazón, pero no construirán amor ni afecto.
Eso también se refleja en NUESTRO PRÓJIMO y comunidad. Es nuestro desafío, ser los primeros en parar esta situación, en salvar esa estrella de mar única, por a ELLA SI LE IMPORTA, como decía el gran Felipe Cubillos; los invito a este desafío en este PASEO DEL PERRO.
Y este es el SEGUNDO MIEDO de estos 6 MIEDOS, así, que vamos avanzando.
Esta es la reflexión de hoy lunes 21 de noviembre del PASEO DEL PERRO, y ahora a terminar el mes.
Espero que tengan una excelente semana.
¿Tienes algo que compartir?; ¡¡TE INVITO A HACERLO!!
