Por: Laureano Turienzo Esteban – CEO Retail news trends, Profesor.
La teoría general nos deja a entender que no tiene sentido: en un mundo digital, con consumidores ultra-digitales, todo lo que necesitamos comprar puede ser enviado a la conveniencia y la comodidad de tu hogar. Y en muchos casos, te resultará más barato: ahorras tiempo, carburante, ahorras colas para pagar…
¿Y entonces porque la gente va a las tiendas? A tal punto que incluso gran parte de las compras online que hacen los consumidores van a recogerlas a tiendas físicas. En muchos sectores, la venta pura online (consumidores que ordenan online, y la reciben en sus domicilios de entrega, o las devuelven desde estos, sin ninguna interacción de las tiendas físicas, ya sea para investigar, testar, probar productos, o simplemente recogerlos o devolverlos), apenas llega al 5%.
Pero, ¿por qué?
¿Por qué iban antes de Covid, y por qué regresaron masivamente a ellas en tiempos de covid en cuanto se lo permitieron?
Por el hecho fundamental: las compras son un acto social.
Hace poco alguien me afirmó que él jamás socializaba cuando iba a comprar, que, por ej, él iba a un supermercado, y lo que esperaba era coger las cosas rutinarias rápidamente y volver a su casa, sin perder mucho tiempo. Pero incluso en ese extremo, está socializando. Los datos nos dicen que cerca del 40% del tiempo que estamos despiertos cada día, estamos usando dispositivos conectados a internet, viviendo una vida resumida en whatshapp, buscando la verdad revelada en Google, relatando a nuestros conocidos, nuestra vida en Facebook, Ticktok, Twitter. Jugando hasta el insomnio en Fortnite… Él no era consciente, pero fuera de su hábitat laboral y familiar, esos viajes al supermercado muchos días eran las únicas conexiones efímeras que tenía con otras personas.
Andar por las calles, ir a una tienda, al parque, caminar entre los demás, mirarlos, ser mirado, es un acto humano y social.
Llevan casi 15 años matando a las tiendas físicas en sus predicciones, asesinando a los centros comerciales… Se trata del fracaso documentado más grande de la historia de las predicicones, Y,lejos de excusarse, de vez en cuando regresan para decirnos que “tal vez” esto de ir a las tiendas físicas se va acabar en un mundo digital. Son una estafa conceptual: en el mundo no hay menos tiendas por la subida del comercio electrónico, sino que hay muchas más: estos últimos 15 años, muchos sectores han visto menguado su parque de tiendas físicas, pero la mayoría han crecido: estos años han sido la edad dorada del crecimiento de los supermercados, tiendas de conveniencia, tiendas especializadas…. Incluso se han abierto miles de centros comerciales.
Y en el futuro, no es que habrá menos tiendas físicas, es que habrá muchas más que hoy (más pequeñas y más digitalizadas y conviviendo perfectamente con el online), por las razones que he explicado en muchas ocasiones, en contra la teoría general,
