El paisaje logístico hoy es fundamental para el funcionamiento de la economía global. Este 2023, hay varias tendencias que están impactando la industria.
Por Pedro Varas Bruzzone, Socio y Chief Marketing Officer (CMO) de RockTruck
La logística hoy es fundamental para el funcionamiento de la economía global. Este 2023, hay varias tendencias que están impactando la industria, desde la última milla hasta la automatización de bodegas.
Paisaje logístico
En primera instancia está la última milla, que es el proceso de entrega a un cliente final, desde una bodega. Con los avances en la industria, este término ha dejado de ser una novedad para convertirse en el estándar del sector logístico. Ahora, los consumidores esperan este nivel de servicio como algo básico y lo dan absolutamente por sentado. Muchas PYMES, hasta la fecha, han dependido en gran medida de los servicios de logística de terceros para realizar sus entregas, sin embargo, según un reciente análisis de Procurement Tactics, este podría ser el año crucial en que estas empresas empiecen a adoptar la logística de última milla como un servicio en sí mismo para satisfacer una demanda que no para de crecer.
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Otro aspecto clave son los envíos internacionales del e-commerce, el que ha transformado profundamente la forma en que operan las empresas y el cómo interactúan con los consumidores. Para nadie es un misterio que la tecnología ha impactado positivamente en la mejora en los procesos de envío, pero algo está comenzando a pasar: esa velocidad y servicio clásico del e-commerce está empezando a ser exigido en las entregas de internacionales. Esto ha aumentado significativamente la relevancia de los socios logísticos y podría traducirse en un nuevo campo de juegos y competencia para los distintos operadores existentes en la actualidad.
Aunque se habla mucho de tecnología, la piedra angular de la logística está en los conductores. Puedes tener la plataforma que quieras, pero recordemos lo básico: la industria de transporte por carretera es eso, una persona que toma un paquete, lo carga en su vehículo y lo lleva de un punto A a un punto B. Cuando ellos faltan o no están alineados con el operador logístico, se generan interrupciones potencialmente catastróficas en la logística. Según datos de un artículo de la revista Forbes, la proporción de conductores calificados a ofertas de empleo es sorprendentemente baja: existe un chofer adecuadamente calificado por cada nueve ofertas de trabajo. Esto no es más que una luz roja, que no sólo alerta sobre la escasez de conductores, sino también en las calificaciones que se requieren para realizar adecuadamente este trabajo.
Volviendo al aspecto tecnológico, en Latinoamérica hay una tendencia en movimiento, aún algo incipiente, pero no por mucho, hacia bodegas totalmente automatizadas, como se sugiere en un artículo de TechCrunch (marzo, 2023). Si van a centros logísticos en Chile y miran dentro de cada bodega, cosa que en lo personal hago por curiosidad, verán que todo es sumamente manual, excepto por unos pocos jugadores que están apostando por sistemas autónomos, que remodelan de manera significativa el panorama de la logística de almacenes. Apuesto a que, en el futuro no muy lejano, serán las nuevas compañías logísticas de base tecnológica, pero que entienden que esta es una industria operativa y de procesos, quienes podrán tener automatizado el picking.
¿Qué se nos viene en el corto plazo? La industria logística podría aumentar en USD 319.65 millones al 2027, gracias a que la automatización y la inteligencia artificial (IA) se han puesto de moda. Este 2023, se está volviendo más común en una variedad de procesos. Esto me hace tener en consideración que lo más importante al crear y operar una empresa, especialmente aquellas que aspiran a ser una de las más importantes de Latinoamérica, es que el foco de un negocio de procesos está en crear sistemas soportados y que sean más eficientes gracias a la tecnología, que trabaje a la par de los procesos manuales.
