“La última milla por sí misma no es milagrosa y funciona bien, tiene que estar bien diseñada”.
La última milla “será esencial”, porque “al tiempo que aumentan las compras en línea también se incrementarán las restricciones a la movilidad de los vehículos menos ecológicos”
Conforme las grandes ciudades van regresando al trafico habitual y muchas empresas continuan con el trabajo remoto, las entregas de pedidos por #ecommerce se hacen cada vez mas difíciles, obligando a las empresas no solo a contar con una red de #almacenesurbanos sino también de buscar una distribución ecológica.