Los datos más recientes de la Organización Mundial de la Salud[1] señalan que para 2050, una de cada cuatro personas presentará problemas auditivos, es decir dentro de 30 años habrá más de 2.4 mil millones de individuos con algún tipo de complicación o pérdida auditiva.
Estas cifras globales son un importante indicador que nos permite cuantificar el daño, pero sobre todo nos alienta a realizar un análisis profundo sobre la necesidad de políticas públicas que generen soluciones determinantes, de última tecnología e innovadoras para mejorar la calidad de vida de las personas con problemas auditivos, de igual manera nos advierte de la importancia de promover una cultura de la detección oportuna.
A través de los sonidos, la audición nos conecta con todas las cosas que amamos en nuestro mundo. La parte sensorial del cuerpo se complementa entre sí, de ahí que tener un adecuado funcionamiento del oído está relacionado estrechamente con el desarrollo del lenguaje.
La parte social es el otro componente que favorece la calidad de vida de las personas que cuentan con el beneficio de una solución auditiva, se trata de un círculo virtuoso que inicia con el desarrollo de la audición, el habla, el lenguaje, la cognición y la comunicación, lo que permite su plena integración a la sociedad.
Según datos de la OMS, las causas de pérdida auditiva en la población se dividen según su prevalencia: elevada (causas hereditarias, Otitis Media Crónica, Presbiacusia -pérdida auditiva relacionada con la edad-); moderada (exceso de ruido, sustancias químicas y fármacos ototóxicos, problemas de salud prenatal y perinatal, causas infecciosas, cerumen, cuerpos extraños); baja (factores relacionados con la alimentación, causas de origen traumático; Enfermedad de Méniere; enfermedades cerebrovasculares).
En cuanto a soluciones, la innovación tecnológica incluye dispositivos como implantes cocleares, creados para personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda; la estimulación acústica combinada, para personas de sordera parcial; implantes de oído medio, para personas con pérdida auditiva neurosensorial de leve a severa o pérdida auditiva conductiva y mixta; implantes de conducción ósea, para personas con pérdida auditiva conductiva y pérdida auditiva mixta o sordera unilateral. Por último, el Sistema de Conducción Ósea (ADHEAR), el cual es un novedoso sistema auditivo que revoluciona el concepto de conducción ósea que no requiere de cirugía, para personas con pérdida auditiva conductiva.
Hoy más que nunca es importante abrir la conversación sobre las discapacidades auditivas, escuchemos las necesidades, busquemos estrategias exitosas que mejoren la vida de millones de personas. Hablemos públicamente de detección oportuna y pongamos a disposición de quienes lo necesitan, todas las opciones de soluciones auditivas.
La detección temprana de hipoacusia es la oportunidad de brindar calidad de vida desde la infancia. En ese sentido, desde MED-EL y como líder global en innovación de soluciones para la pérdida auditiva invitamos a la comunidad médica y a los futuros padres a realizar las pruebas necesarias para poder atender el problema a tiempo.
La misión de MED-EL es superar la pérdida de audición como una barrera para la comunicación, es así como, durante más de 40 años nuestros sistemas han restaurado la audición a más de 200,000 personas en el mundo. Es un orgullo ser líderes en innovación que realizan progresos tecnológicos, descubrimientos exclusivos año tras año y contribuyen a mejorar la calidad de vida de quienes necesitan una solución auditiva.
