Evolución de los servicios de gestión financiera en el sector educativo peruano

Antonio Rolando el sector educativo

Por Antonio Rolando, CEO de Kashio

Evolución de los servicios de gestión financiera en el sector educativo peruano

En los últimos tiempos, el sector educativo ha pasado por grandes cambios, a raíz de la pandemia y los avances tecnológicos, que implicaron modificaciones internas en todos los niveles, desde la metodología de enseñanza, hasta desafíos en los procesos de recaudación, cobranzas y canales de pago.


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Ante ello, fuimos testigos de cómo rápidamente los índices de morosidad se incrementaban, tanto en centros educativos grandes como pequeños, generando una gran problemática por resolver: la falta de digitalización, que obligaba, a las instituciones con mayor cantidad de alumnos, a invertir en personal extra para realizar llamadas de cobranza de forma manual, procesar la información y que finalmente puedan realizarse los pagos. Sin embargo, a pesar de todos estos esfuerzos, la morosidad en el sector educativo llegó a niveles del 80% durante la pandemia, según la Asociación de Colegios Particulares Amigos (Adecopa).

Afortunadamente, y a consecuencia de ello, se impulsó aún más la tercerización de servicios de gestión financiera para brindarnos herramientas que permitan integrar la comunicación con el cliente, mejorar la experiencia del usuario y los medios de pago, llevando a cabo procesos seguros, ágiles y eficientes; y, además, permitiendo en algunas instituciones recaudar pensiones un 50% más rápido, con una reducción de los índices de morosidad en 20%.

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En la actualidad, el sector educativo viene haciendo uso de soluciones que facilitan el acceso y la gestión de servicios a través de un ecosistema interconectado en la nube, generando mayor rentabilidad, debido a que se puede contar con análisis más exactos, y disminuir hasta un 90% las tareas operativas.

Esto permite que las acciones fluyan de manera más rápida, logrando dedicar menos tiempo a tareas administrativas y más tiempo a la estrategia, pues se automatiza, consolida y plasma los pagos de forma inmediata a fin de tomar decisiones más eficientes y acertadas. Asimismo, brinda la posibilidad de obtener reportes en tiempo real y enviar recordatorios de pago, optimizando tiempo y dinero.

Todo ello ya es una tendencia a nivel mundial, ya que no solamente las instituciones se ven beneficiadas, sino que se volverá una completa necesidad para los usuarios, quienes han cambiado totalmente su estilo de vida, priorizando tiempo, seguridad e inmediatez. Esto se ve reflejado en las últimas estadísticas del  Banco Interamericano de Desarrollo, que refiere que más del 60% de peruanos realiza trámites en línea, y se espera que esta cifra vaya en aumento.

A lo largo del tiempo hemos visto cómo el sector ha venido creciendo y ha pasado por un gran desafío en cuestión de aceleración digital. Por ello, es primordial comenzar a trabajar en una verdadera cultura financiera que permita conocer a detalles los requerimientos de los usuarios para lograr procesos exitosos y mejorar la experiencia de servicio.

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