En verdad, muchas tiendas son cementarios de stocks.

LAUREANO TURIENZO ESTEBAN - industria del retail

Por: Laureano Turienzo Esteban – CEO RETAIL NEWS TRENDS. PROFESOR.

Conceptualmente fueron ideadas en un mundo donde los retailers eran básicamente distribuidores de productos y poco más. Por esa razón, la aplastante mayoría de las tiendas en el mundo son depósitos de productos. Esto es ineficiente y absurdo en el mundo en el que estamos. Y ningún retailer en el mundo lo ha resuelto.


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Las latas de atún, los rollos de papel higiénicos, las botellas de agua, viajan de almacenes centrales del retailer o de las marcas al almacén de las tiendas. De ahí hacen otro viaje sin cese a las estanterías. Empleados en una constante vigilia deambulan de la estantería al almacén de la tienda en busca de productos para rellenar las estanterías. Esto da lugar a ineficiencias de optimización de tiempos de estos empleados (sus funciones deberían viajar del tiempo dedicado a mover mercancías a hacer mejor tareas que mejoraran las experiencias positivas de compras de los clientes) , y lo que es más grave a un sinfín de rupturas de stock, es decir a pérdidas de ventas y a lo peor de lo peor: a la frustración de los consumidores.

Esto debería tener los días contados. ¿Qué le aporta a una tienda tener estanterías llenas de papel higiénico y botellas de lejía? Hoy el 90% del espacio de muchas tiendas es espacio de stock, cuando el 90% del espacio debería ser de productos o servicios que generen experiencias positivas: productos frescos, degustaciones, clases de cocina, clases de nutrición¡, clases de estilismo…etc.

Un cliente debería entrar en una tienda y tener en las estanterías un solo producto de estos productos «no-experienciales». Estos productos tendrían unas etiquetas digitales aparecería la descripción, precio y en algunos casos la fecha de caducidad. El cliente los escanería desde su móvil o desde un escaner, indicaría las cantidades, y al terminar la compra de los no-experienciales, lo señalaría, y le indicarían en qué caja de recogida estaría preparado su pedido de los no-experienciales y en cuánto tiempo. E incluso se le podrían enviar a sus domicilios. Mientras, el cliente aprovecharía para ir a comer algo, tomar un café, asistir a una clase de cocina, hablar con un nutricionista, interactuar con un estilista o simplemente ir a comprar la carne, el pescado u otros productos frescos.

(Extracto de mi conferencia Congreso Internacional Retail Buenos Aires, Septiembre 2018)

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