El Retail contribuyó a la liberación de la mujer.

Laureano Turienzo, CEO Retail News Trends

Por: Laureano Turienzo Esteban – CEO RETAIL NEWS TRENDS. PROFESOR. 

Uno siente que es bastante desconocido hoy cómo el Retail contribuyó a la liberación de la mujer.


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70.000 mil personas se arremolinan en torno a una tienda. La abren hoy. Es 1876. La mayoría de las personas son mujeres. No se ha visto nada igual antes. Estamos en Filadelfia. Se inaugura el “Grand Depot” de Wanamaker.

Dentro, los empleados (la mayoría mujeres) esperan a la apertura. Hay un órgano increíble, y 1.100 asientos donde las clientas pueden sentarse a hablar sobre sus compras con sus amigas.

Los periódicos escriben acerca de esta emancipación de las mujeres traída por los grandes almacenes.

Eran los días en occidente donde cualquier mujer burguesa que saliera al aire libre sin compañía sería vista como una “mujer pública” o prostituta. Virginia Woolf escribe: “Caminar sola por Piccadilly es como caminar en una “bata y llevar una esponja de baño”.

Los grandes almanacenes durante las décadas posteriores fueron el lugar perfecto, y silencioso, de la liberación de la mujer. El lugar donde socializar.

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En el restaurante de Macy´s en Nueva York, llegan a juntarse 2.500 mujeres solas. Algo está sucediendo. Los libros de historia dicen que fue el germen real del moviento real de la liberación de la mujer.

Harrods de Knightsbridge, en Londres, tenía 6.000 empleado, el 90% mujeres, y 80 departamentos diferentes. Gran parte de sus clientes eran clientas. Selfridges, también en Londres, es la concentración más grandes de todos los tiempos de mujeres solas. Dicen los periódicos de la época. Mujeres solas y seguras.

Henry Gordon Selfridge publicó en periódicos mensajes de apoyo al movimiento sufragista. Ondeó la bandera de la Unión Social y Política de Mujeres (WSPU) sobre su tienda, se convirtió en la primera tienda en ofrecer baños para mujeres. Selfridges vendía cintas de rayas tricolores del movimiento feminista para sombreros, cinturones, rosetones e insignias.

Ir de compras fue una declaración de independencia.

Selfridges, en Londres ,abre el 15 de marzo de 1909. Un millón de personas acuden en su primera semana de vida. La mayoría son mujeres. En unas semanas más, se convierte en el lugar más visitado de Londres, por encima del Big Ben .Cinco pisos de altura con tres niveles de sótano, una terraza en la azotea y más de 100 departamentos y servicios para visitantes, incluido un salón de té, una peluquería, una biblioteca ,suntuosos guardarropas para damas….

Pero muchas mujeres no podían disfrutar de esa liberación que trajo los grandes almacenes: mujeres de la clase trabajadora, y las mujeres de color . Décadas después, hace un siglo, los almacenes introdujeron el compra hoy y págalo a plazos. Masas de proletarias en la frontera de la clase media, vieron en los grandes almacenes sus “palacios liberadores”.

Uno siente que es bastante desconocido hoy cómo el Retail contribuyó a la liberación de la mujer.

 

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