«El ejemplo de China en electromovilidad», es el tema que nos propone Felipe Donoso, CEO de Enérgica City.
La era de los vehículos eléctricos ya llegó y, tal como ha sucedido con otras tecnologías, los países comienzan a posicionarse como líderes, tanto en consumo como en producción. Chile a nivel de América Latina es uno de los líderes en consumo de electromovilidad. Hemos puesto en marcha buses de transporte, camiones, vehículos de última milla y también sistemas de carga rápidos, lentos, públicos y privados. No obstante, a nivel de producción, nos falta mucho por avanzar.
China, por su parte, es líder no solo en consumo de electromovilidad, sino que también en producción. Cuenta con vehículos de todos los tipos, desde livianos con marcas que no existen en Chile, camiones livianos de minería hasta vehículos autónomos de transporte de personas. Caminando por las calles del país asiático, a simple vista, un 30% de los vehículos livianos en vía pública, se distinguen por la patente verde.
En transporte público, tienen una alta penetración de electromovilidad. Por ejemplo, 100% de los taxis son eléctricos.
En cuanto a baterías, no solo tienen la tecnología de fabricación de celdas, sino que también cuentan con fábricas de ensamblado robotizado para evitar fallas en las conexiones, bajo un estricto control de calidad. Así también, las estaciones de carga son principalmente estacionamientos que se utilizan para carga lenta y rápida. Usan videos de analítica y siempre con el foco puesto en la facilidad de pago. Los cargadores son de fácil acceso, desde plataformas de control y gestión.
La electromovilidad en China ya no es un tema, es un avance progresivo. Las personas no se sorprenden por ver un vehículo eléctrico en la calle, no se cuestionan cómo funcionan los sistemas de carga o si las baterías son algo confiable.
En Chile no solo debemos seguir avanzando, sino que también debemos trabajar en comunicar más y mejor sobre qué es la electromovilidad. Sus beneficios son innegables y China lo ha comprendido tempranamente.
Es momento de conocer lo que se viene y comenzar a aplicar la tecnología necesaria ahora, antes de que nos pille de sorpresa y perdamos nuestro puesto de líder de electromovilidad en América Latina.