Juan Abarca Cidon – Presidente en HM Hospital
Pasó la Nochebuena y la Navidad y con ellas el discurso de SM El Rey.
Él dijo lo que pudo decir, ya que el momento de crispación política no permite profundizar mucho más sin decantarse para un lado ni para otro, y por supuesto que eso no lo tiene permitido, ni debe hacerlo. Debe de ser el punto de encuentro neutro de unos y de otros y, en mi opinión, lo hizo y represento el pensar de la mayoría.
Aunque a mi me hubiera gustado que hubiera dicho algo más, creo que dejo frases que nos deberían hacer reflexionar porque al final los acontecimientos que estamos viviendo pueden poner en peligro nuestra democracia; que hay peligro de que se erosionen las instituciones que nos han traído hasta aquí desde la transición, que el futuro debemos de afrontarlo todos juntos porque por el camino que vamos existe riesgo de confrontación y división social y otra serie de comentarios que analizados fríamente deberían darnos que pensar mucho.
El problema es que muy posiblemente a nuestras autoridades les entrara por un oído y les saldrá por otro y los españolitos de a pie poco podemos hacer más que tratar de denunciar tanta violencia verbal y esperar a las urnas.
En cualquier caso hago alusión al discurso del Rey por que es totalmente aplicable a lo que ocurre en nuestro SNS.
Nuestro sistema de Salud se deteriora a pasos agigantados entre otras cosas por la falta de consenso que existe entre todos aquellos que tienen responsabilidades, desde los partidos políticos a los representantes de los profesionales, pasando por las organizaciones sindicales o las empresariales.
La tensión y la crispación se palpa entre sus protagonistas porque el SNS se esta derrumbando y todo el mundo lo sabe y como al final tendrá que salir adelante de una u otra forma, nadie quiere salir mal en la foto. Pero así sólo conseguiremos alargar su agonía con las terribles consecuencias que esto tendrá sobre la Salud de la población.
Entramos en año electoral, lo que no es bueno para nuestro sistema sanitario, pero si no somos capaces los propios miembros del sector de poner un poco de sentido común, de dejar a un lado intereses particulares y pensar en lo que nos une, primero será malo para todos porque todos perdemos con el deterioro del sistema y segundo es imposible que podamos exigir a las autoridades políticas, que no forman parte de nuestro sector que se pongan de acuerdo en nada.
El pacto debería ir desde el sector sanitario hasta los políticos. De no hacerlo así lo que habrá es una imposición que no contentará a nadie.
Y ya vemos que hay políticos que celebran la Navidad con un video en el que alientan a que en la noche de Nochebuena unos miembros de la familia se rebelen contra otros porque no sólo les da igual, si no que viven de esa crispación y de esa desestabilización de todo.
Imaginaos si ponen sus manos en el sector de la Salud.
Pues como dijo SM pero aplicado a nuestro sector, el futuro esta en nuestras manos.
Con esta semana acaba el año…
